A menos de 72 horas de la marcha que los dirigentes gremiales encabezarán contra el acuerdo con el FMI, las principales cabezas de la Multisectorial #21F fueron recibidos por el titular de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), monseñor Oscar Ojea, en el primer piso de la sede de la entidad ubicada en Suipacha al 1000.
El apoyo público del obispo de San Isidro a la protesta no es azaroso, va en línea con la preocupación del Papa Francisco por el regreso de la Argentina a las huestes del Fondo Monetario Internacional. Los estrechos vínculos entre Gustavo Vera y Jorge Bergoglio hicieron el resto.
«Hubo críticas al organismo internacional, se recordaron las declaraciones de (Jorge Rubén) Lugones y (Marcelo Daniel) Colombo, la posición de la encíclica Laudato Sí sobre el sistema capitalista y el último documento del Vaticano sobre la excesiva toma de deuda, la especulación financiera, las offshore y la cultura del descarte», informó un vocero del encuentro a diario Ámbito Financiero.
En la charla de una hora, Ojea les expresó un explícito respaldo al «trabajo» de los sindicatos que «pelean por el trabajo como dignidad y no como mercancía». Según informaron fuentes eclesiásticas, el titular del Episcopado se mostró «abierto» al diálogo y escuchó la preocupación expresada por los dirigentes sobre las tarifas y sobre los riesgos de un posible acuerdo con FMI.
Asimismo, desde la Curia destacaron que los presentes se comprometieron a seguir «reflexionando y profundizando» el contenido del paper vaticano emitido por la Congregación para la Doctrina de la Fe, titulado «Consideraciones para un discernimiento ético sobre algunos aspectos del actual sistema económico-financiero»
Sobre el final del intercambio, la Iglesia invitó a los popes sindicales a participar de la Semana Social, que organiza la Pastoral Social, del 22 al 24 de junio, y Ojea les recordó que justamente esa comisión es la que acompaña el diálogo con los trabajadores.
A la salida, Pablo Micheli aseguró que hubo coincidencias en «exigirle al Gobierno que no acepte el acuerdo» y reveló: «Quedamos en hacer acciones y encuentros conjuntos para deliberar sobre la palabra del papa Francisco y también que nos ayuden a pelear contra la reforma laboral».
Lugones, titular de la Pastoral Social y hombre muy cercano al Sumo Pontífice, fue uno de los primeros jefes religiosos en cuestionar la decisión del Gobierno de establecer negociaciones con el FMI. «Nosotros no vemos que ésta sea una salida inteligente; no es una salida inteligente», señaló a las pocas horas que Mauricio Macri anunció el inicio de las gestiones para lograr una nueva línea de financiamiento.
Colombo, actualmente obispo de La Rioja, fue nombrado este lunes por el Papa arzobispo de Mendoza. El motivo: encabezar la pelea contra el polémico fracking en una provincia gobernada por Alfredo Cornejo, presidente de la UCR, principal aliado al PRO a nivel nacional y posible candidato a vicepresidente en una virtual reelección de Macri.
La arquidiócesis de Mendoza quedó vacante el 8 de diciembre de 2017 por la inesperada muerte de su titular Carlos María Franzini. Colombo será el sexto arzobispo de Mendoza y séptimo diocesano de la sede mendocina. Hoy, es vicepresidente 2° de la Comisión Ejecutiva de la CEA y también uno de los que fustigó a Cambiemos por el retorno a los brazos del Fondo. «Es necesario apelar a una gran responsabilidad del gobierno y cuidar a los más vulnerables. Evidentemente cuando se piden estos créditos uno debe resignar ciertas cuestiones, hay que pensar en hacerlo de otra manera», advirtió, y pidió al Poder Ejecutivo «una gran responsabilidad para no hipotecar la vida de las generaciones futuras».