Centenares de conductores de taxis y remises de Mar del Plata realizaron anoche una nueva protesta frente al polideportivo de la ciudad balnearia, donde se desarrollaba la entrega de los Premios Estrella de Mar. Denunciaron la falta de repuestas por parte del municipio local ante la presencia de las plataformas digitales como Uber y Cabify, que operan esta temporada a pesar de estar prohibidas.
El presidente de la Sociedad de Conductores de Taxis, Pablo Sánchez, manifestó a Télam :«Nos hemos movilizado hasta el polideportivo para entregar folletería a los concurrentes del Estrella de Mar con el único fin de visibilizar la problemática que esta atravesando el transporte publico por la complicidad existente entre el poder político y las aplicaciones digitales».
«Hay una ordenanza que las prohíbe y el Gobierno del intendente (Guillermo) Montenegro mira para otro lado, porque no sale a controlar. Nosotros para salir a trabajar debemos cumplir con la ordenanza municipal pero a las aplicaciones como Uber y Cabify, que no están permitidas, las dejan trabajar igual», indicó Sánchez.
Asimismo, aclaró que no realizaron «ningún paro» sino que manifestaron «en dos carriles de los cuatro de la avenida Juan B. Justo, frente al polideportivo de esta ciudad, para repudiar la actitud que esta teniendo el municipio».
«Estamos en alerta y movilización y la próxima semana podríamos llevar a cabo una medida de fuerza si seguimos sin tener respuesta por parte del intendente Guillermo Montenegro (JxC). En las próximas horas nos juntaremos con los compañeros y resolveremos las medidas a tomar», sentenció.
«Lo que estamos pidiendo con los compañeros es que nos escuchen los reclamos y que ante todo hagan cumplir las ordenanzas vigentes, que prohíben las aplicaciones de transporte como Uber y Cabify», añadió.
El conflicto comenzó a principio de este año, cuando se empezó a observar un recrudecimiento del funcionamiento de las aplicaciones Uber y Cabify, pese a que hay una ordenanza municipal que las prohíbe.
La primera medida que realizaron los conductores de taxis y remises fue un paro de 24 horas con cortes y protestas intermitentes en diversos puntos de la ciudad, entre ellos el acceso por la Ruta Nacional 2, y la segunda fue un paro que duro 12 horas también con corte parcial sobre la autovía 2.
Ante ello, la municipalidad de General Pueyrredón denunció ante la justicia el actuar de los taxistas y remiseros y amenazó con quitarles las licencias, mientras que ellos denunciaron al intendente por falta de incumplimiento de funcionario público.