La producción textil registró una merma de 5,3% en los primeros nueve meses del año respecto a igual período de 2015, mientras que la fabricación de prendas de vestir marcó una caída del 11% en similar lapso, según un informe elaborado por la consultora Investigaciones Económicas Sectoriales (IES).
La baja en la producción estuvo ligada principalmente al aumento a la caída del consumo interno, en un contexto en el que los precios de los productos marcaron incrementos superiores al 35% en lo que va del año.
Otro detalle pasó por el crecimiento de las cantidades importadas, que entre enero y septiembre subieron 14,7%, al sumar 198.000 toneladas frente a 173.000 toneladas de igual período del año anterior.
El informe señaló que, en los últimos años, las importaciones se habían visto contenidas por el peso de los controles y las restricciones aplicadas por medio de la Declaración Jurada Anticipada de Importación (DJAI).
En los primeros nueve meses del año, las ventas externas del sector textil e indumentaria llegaron a los u$s 323,3 millones con un incremento del 2,8% en comparación con el mismo período del año anterior, una suba leve que se explica principalmente por las mayores ventas de fibras de lana y de algodón.
En lo que respecta a volúmenes exportados, alcanzaron un total de 89,5 miles de toneladas, un 0,4% por debajo de las 89,8 miles de toneladas de igual lapso de 2015.
Con esta tendencia, el saldo comercial del sector textil y de indumentaria arrojó un resultado negativo en el acumulado de nueve meses de 2016, con u$s 793 millones, déficit levemente superior al registrado durante el mismo período del 2015 de u$s 728 millones.
El Director de IES Consultores, Alejandro Ovando, remarcó que “en el mediano plazo, las perspectivas del sector textil e indumentaria dependerán del impacto de la implementación del plan Productivo Nacional impulsado por el Gobierno, que busca una reconversión sectorial”.