Muchos gobiernos provinciales volvieron a ratificar que, debido a las dificultades económicas, les resultará difícil afrontar un plus para los trabajadores de sus administraciones. En algunos de los distritos donde se anticipó voluntad de pago, todavía no se confirmó el monto ni la fecha para hacerlo efectivo.
En San Luis, sin embargo, el gobernador Luis Alberto Rodríguez Saá había afirmado con antelación que pagaría un bono de fin de año en una cifra superior al del gobierno nacional. El monto de la cifra final que favorecerá a los estatales puntanos se podría conocer en los próximos días. Los trascendidos indican que sería en torno a los 7000 pesos. O algo mayor en dos cuotas.
Según el diario ámbito.com, hasta el momento, el ramillete de mandatarios que anunció un bono incluye a San Juan ($5.600), Salta ($3.000), Tucumán ($750), Misiones ($1.850), San Luis y Corrientes, mientras que La Pampa lo acordó ya a mediados de año ($5.000).
En la otra vereda, el lote de gobernadores que dijo no estar en condiciones de pagar un plus incluye a la macrista María Eugenia Vidal. Según indicó el portal InfoMerlo, desde el Gobierno bonaerense confirmaron que «Nación tampoco tiene previsto ayudar financieramente a ninguna provincia. Cada una tendrá que resolverlo de acuerdo con sus posibilidades financieras».
El ministro de Economía de Buenos Aires, Hernán Lacunza, explicó semanas atrás que «un bono de mil pesos para 600.000 trabajadores significa 600 millones de pesos», y consideró que otorgarlo sería «ahondar un déficit que deberán pagar los contribuyentes».
En el caso de Santa Fe, el gobernador Miguel Lifschitz había dicho que no pagaría el bono de fin de año «salvo que Nación avance en un acuerdo con sus propios trabajadores públicos y entonces condicionará de alguna forma a las provincias». Hoy mismo se reunirán distintos gremios estatales santafesinos con el Ejecutivo provincial.
El mandatario mendocino Alfredo Cornejo reiteró que la provincia «no dará un bono de fin de año», aunque admitió que su intención es «depositar una ayuda extra a los empleados para las fiestas».
Alberto Weretilneck, gobernador de Río Negro, también descartó que se pueda otorgar un bono como exigieron los gremios estatales a nivel nacional y pidió «comprensión» de los sindicatos provinciales y municipales. El mismo argumento sumó el entrerriano Gustavo Bordet, quien además reconoció dificultades para hacer frente a los aguinaldos.
La gobernadora de Catamarca, Lucía Corpacci, anticipó que «sin apoyo del Gobierno nacional», la provincia no podrá afrontar el pago de esa erogación. En Jujuy -donde también se convocó para mañana a los gremios-, el ministro de Hacienda, Carlos Sadir, remarcó que «no hay disponibilidad de recursos económicos» para abonar ese beneficio.
El gobernador de Neuquén, Omar Gutiérrez, manifestó que «si fuese ya fin de año, no tendríamos la disponibilidad económica para pagar» el bono, aunque aseveró que el diálogo con los sectores gremiales «es permanente».
En Tucumán, el gobernador Juan Manzur, no descartó la posibilidad de abonar un bono, pero hasta el momento no fijó una posición definitiva sobre el tema y recordó que en septiembre el Gobierno tucumano «otorgó $750 a los trabajadores del Estado».
Misiones, por su parte, pagará, entre el 18 y el 20 de diciembre próximos, «un bono totalmente independiente» de $1.850 para activos y pasivos del estado provincial, que «no será tomado a cuenta de paritarias 2017», según confirmó el ministro de Hacienda provincial, Adolfo Safrán.
Mientras, San Juan ya pagó la primera de las cuatro cuotas del plus de fin de año y la semana que viene cancelará la segunda cuota de $1.400. Lo mismo hizo Salta ayer, en base a la primera cuota de un bono de $3.000.
El mandatario correntino, Ricardo Colombi, confirmó la voluntad de pago de un plus, aunque aún no definió el monto. Recordó, sin embargo, que la administración provincial viene pagando desde hace 38 meses una suma adicional al salario de los estatales, que se transformó en remunerativa este mes, y precisó que para eso se volcaron más de $1.500.