(Por Jorge Duarte) El ministro del Interior, Eduardo «Wado» de Pedro, casi en modo candidato, se reunió con la cúpula de la CTA de los Trabajadores. Hablaron de sus chances electorales, de su vínculo con Luis Barrionuevo, de la foto con Rendo, de la venia de CFK y de sus vínculos con caciques del conurbano para ampliar al Frente de Todos. Expectativa por el discurso del jueves.
Algo más tarde de lo pactado y acompañado de dos intendentes, ayer el ministro del Interior, Eduardo «Wado» de Pedro visitó a la conducción nacional de la CTA de los Trabajadores. Tuvieron primero una reunión formal de una hora y más tarde un largo asado en el que abordaron en profundidad todos los temas de agenda.
Institucionalmente el encuentro sirvió para ajustar detalles de lo que será la movilización de este jueves 25 de mayo que tendrá a Cristina como eje vertebrador. El objetivo fue seguir «convocando y reflexionando sobre lo que va a ser el 25 de mayo en términos de militancia, seguimos convocando a las familias argentinas, a los trabajadores, a recordar a ese dirigente Néstor Kirchner, que nos devolvió a muchos pibes la confianza, la esperanza», dijo el ministro.
En la práctica fue mucho más que eso. La primera visita institucional del funcionario a la central obrera lo topó con un afiche de HIJOS que lo emocionó y repasó todos los temas, especialmente la idea de que él podría ser el elegido por la vicepresidenta para encabezar una fórmula presidencial que compita en las próximas PASO representando al kirchnerismo, de mínima, o al Frente de Todos como síntesis, de máxima.
«Yo soy un militante y como siempre voy a estar dónde Cristina decida que tenga que estar», les dijo de Pedro a los sindicalistas ante las insistentes preguntas. Casi un formalismo. También aclaró que no estaba al tanto de la decisión de la Vicepresidenta respecto de la estrategia electoral ni tenía certezas respecto del contenido del discurso que va a pronunciar en la Plaza de Mayo. A pesar de eso contó que recibió un consejo de CFK: «Empezá a caminar, a construir».
Además los ceteístas le preguntaron por su curiosa relación político gremial con el líder de los gastronómicos Luis Barrionuevo, quien esta misma semana le levantó la mano: «Queremos que Wado sea el futuro Presidente de los argentinos», dijo ante el Congreso de delegados del sindicato que conduce. Ahí el funcionario recordó el haz de relaciones de Barrionuevo, que trascienden la política y el sindicalismo y que llegan a la justicia, y en lo importante de mantenerlas «neutralizadas» por la capacidad potencial de daño.
Profundizando sobre esa línea «Wado» explicó que era una especie de canciller del kirchnerismo con «el eje del mal», por su también controversial y difundida foto con Jorge Rendo presidente del directorio del Grupo Clarín y mano derecha de Héctor Magnetto. Para darle densidad política a esa situación, remarcó que tuvo la venia de CFK y que se trata de una estrategia coordinada: «Cristina me felicitó», se lo escuchó decir.
Secundaron a de Pedro Federico Achaval, intendente de Pilar y Gustavo Menéndez, el intendente de Merlo. Ambos destacaron frente a los gremialistas el perfil de conducción del ministro y las chances que genera su figura para poder ampliar el Frente de Todos, algo que la propia Cristina viene pidiendo con insistencia.
Entrando en detalles de una hipotética construcción futura, repasaron charlas que ya mantienen con varios dirigentes del armado de los boina blanca de Facundo Manes en la Provincia de Buenos Aires para poder integrarlos en una especie de nueva transversalidad.