La organización sindical denunció que continúa «empeorando» la situación en la actividad de la construcción y en otros sectores laborales, por lo que adelantó que propondrá al Confederal de la central obrera la inmediata convocatoria a una huelga general.
«La idea es que el Confederal convoque de forma inmediata a un paro nacional en todas las actividades laborales nacionales ante el empeoramiento de la situación general», aseguró Cáceres.
El dirigente gremial explicó que el sector ladrillero todavía aguarda «el cumplimiento de las promesas de inversión en infraestructura, la reactivación plena de la industria de la construcción y el descenso de los niveles de inflación», afirmó.
Sin embargo, indicó que el cierre de numerosas fuentes de trabajo y la caída generalizada del empleo en el área de la construcción imponen condiciones de flexibilización laboral generalizada.
«En ese marco, los trabajadores deben someterse a condiciones indignas y humillantes para llevar el sustento a sus hogares», puntualizó el sindicalista, quien aseveró que «el empleo escasea y no se detiene el alza de precios, lo que implica que las familias ladrilleras deben recurrir a comedores y merenderos comunitarios».
El jefe de la organización gremial subrayó por último que ese cuadro de situación es compartido en mayor o menor medida por casi la totalidad de los trabajadores, por lo que el gremio ladrillero propondrá en el Confederal una huelga general para exigir «la presencia del Estado en la solución de esa problemática».