Las petroleras propusieron que los empleados que más ganan paguen un fondo compensatorio a los que menos ganan y Rucci amenaza con paralizar Vaca Muerta: «No tenemos tiempo para que nos boludeen»

El secretario general de los Petroleros Privados de Río Negro, Neuquén y La Pampa Marcelo Rucci advirtió que, si las empresas no ofrecen una solución para los petroleros que están debajo de la línea de la pobreza, se pararán las operaciones en los yacimientos más productivos del país.

El dirigente Marcelo Rucci convocó a una asamblea informativa en la localidad neuquina de Añelo del Sindicato de Petroleros Privados de Río Negro, Neuquén y La Pampa. El gremio llevó a la reunión con las cámaras empresariales un reclamo salarial por la situación de los trabajadores que están por debajo de la línea de la pobreza y no obtuvo una respuesta satisfactoria.

Frente a esta falta de acuerdo para mejorar los ingresos de los operarios en un contexto inflacionario, Marcelo Rucci lanzó un ultimátum a las compañías y amenazó con realizar un paro para la próxima semana.

“Hace años nosotros teníamos el compensatorio para los compañeros que no generan horas extras, pero nunca lo pagaron. Entonces dijimos ‘vamos a regular esto, vamos a poner la letra clara, blanco sobre negro. El trabajador tiene que cobrar tanta guita como mínimo para no caer por debajo de la línea pobreza’”, afirmó Rucci en diálogo con el portal Más Energía.

Según el dirigente petrolero, las cámaras empresarias propusieron que los trabajadores que más ganan se hagan cargo de ese fondo compensatorio.

“Trajeron lo mismo que habíamos hablado hace un año y medio, lo mismo que hablamos hace cuatro meses, lo mismo que hablamos hace dos meses, y lo mismo que hablamos la semana pasada cuando fuimos a paritarias. Entonces, ¿tenemos cara de boludos?”, cuestionó.

Rucci ponderó que Vaca Muerta es posible gracias al esfuerzo de los trabajadores y cuestionó que el empresariado ningunea los reclamos de los operarios y sostuvo que hay “una vieja camada” de empresarios que se regocija cuando castiga a un trabajador.

“Hay una nueva camada en la industria que entiende lo que estamos pidiendo. Pero está la otra, la vieja camada, que todavía quedan algunos, que sienten felicidad cuando cagan a un trabajador. Hay tipos que, si pueden sacar dos pesos, y decirle al patrón que pudieron estafar a los trabajadores en dos pesos, son felices”, criticó.

“Tratamos de sentarnos, de entender, de hablar, de ponernos de acuerdo, y nos salen con este tipo de cosas. Entonces, la soga la van a cortar ellos, porque nosotros la predisposición al diálogo y al discutir, la tenemos. Ahora, lo que no tenemos es tiempo para que nos boludeen”, advirtió.

Para el dirigente gremial, es una cuestión de voluntad para que el conflicto no escale a mayores. “Estamos hablando de que los más vulnerables de la industria garanticen el plato de comida a su familia. Hay compañeros como en refinería que están por debajo de la línea de pobreza.”, aseveró.

“Por las buenas o las malas, lo vamos a arreglar. No va a existir un petrolero que tenga que pasar ese tipo de necesidades. Los responsables son ellos. Ellos van a tener que arreglar este quilombo. Y espero que lo arreglemos en esta semana. Porque si no, la próxima semana estamos de paro”, advirtió el dirigente gremial.