El secretario general de la UOM Río Grande, Oscar Martínez informó que en asambleas se resolvió acatar la conciliación obligatoria pero reclamaron que se mejore la oferta salarial. Desde las electrónicas en AFARTE respondieron que el ofrecimiento es competitivo y creen que el problema para acordar no es ese sino una «interna sindical»: «Por ahí hay que asumir algún tipo de conducción», picanteó Federico Hellemeyer, titular de la cámara.
La pulseada entre las electrónicas fueguinas y la UOM se mide palmo a palmo. En un breve racconto, recordemos que el sindicato de metalúrgicos reclamó que se abra la negociación paritaria para superar el aumento que cerró el exsecretario general a nivel nacional Antonio Caló de 45%. El sector empresario lo rechazó y el «Zurdo» Martínez, muy presionado por las bases que reclaman por el deterioro salarial, con una elección ganada con lo justo y con el cambio de época en la UOM a nivel nacional, dictó un paro por tiempo indeterminado.
Las electrónicas fueguinas respondieron con una seria amenaza de despidos masivos «con causa justa» y ahí intervino el ministerio de Trabajo que dictó la Conciliación Obligatoria. En esta instancia estamos ahora. El viernes las partes se encontrarán en la audiencia de negociación pactada pero el ambiente está caldeado.
Por su parte, Martínez llevó la decisión de acatar o no la CO a las asambleas en los puestos de trabajo para contar con un aval más transparente y fuerte. Los trabajadores eligieron frenar la medida de fuerza para negociar y Martínez informó que esperan una mejor oferta para el jueves, un día antes de la audiencia, algo que se estila para acelerar los tiempos administrativos.
Por su parte, Federico Hellemeyer, titular de AFARTE, lejos de poner un manto de calma, cargó contra el proceso asambleario para la toma de decisiones que está sosteniendo la UOM Río Grande. En principio manifestó al medio local Aire Libre FM su “sorpresa y desorientación” por poner como fecha límite el día jueves y aseguró que el problema no es la oferta salarial sino una «interna sindical».
“No quiero meterme en la interna de la UOM pero creo que acá hay que llevar la mayor información posible. La patronal hizo cuatro ofrecimientos. El último consistía en un 55% de incremento, desde abril hasta octubre con una instancia de revisión en noviembre. Fue un ofrecimiento muy competitivo y lo sigue siendo”, sostuvo.
Hellemeyer se mostró molesto por la referencia al día jueves y reclamó una contrapropuesta por parte del gremio pero “eso no existió”.
Pero lo que realmente el dirigente empresario rechaza es que las decisiones del sindicato se tomen en asamblea: «No creemos que la cosa se corrija con una mejor oferta o superadora. Creemos que quizás el diálogo, por una pretensión de los dirigentes de llevar el tema a los procesos asamblearios como cuando uno plebiscita totalmente la propuesta. Bueno, por ahí hay que asumir algún tipo de conducción pero no me quiero meter en ese tema. Nosotros seguimos llevando adelante el diálogo pero no veo que vaya a resolverse por el lado nuestro.»