La crisis de conducción del triunvirato parece profundizarse a cada minuto. A pesar de la conformación del «comité de crisis» en la CGT, las horas del modelo tripartito de liderazgo parecen contadas.
A la renuncia de Francisco «Barba» Gutierrez en representación de la UOM de la Comisión Directiva se le suma el alejamiento, en la práctica de los «Gordos» y los «Independientes» que hace rato no aparecen por Azopardo.
Ahora fue el titular de los trabajadores petroleros y presidente de la Confederación de gremios de la energía, Antonio Cassia, quien se pronunció por «no acelerar los tiempos para la reorganización de la CGT».
El gremialista, sin embargo, se mostró a favor de que «el proceso que debe terminar en la elección de quien conduzca el movimiento obrero, respete los pasos previstos».
Cassia que es el secretario general del SUPEh, los trabajadores de YPF, viene trabajando por una reorganización de la central obrera que esté integrada por los gremios que representan a los asalariados independientes de los movimientos sociales.
«Necesitamos una CGT fuerte, representativa de los obreros y que reemplace el triunvirato por un secretario general fortalecido y representativo, pero no en caliente y sobre el fin de año», remarcó.
Y concluyó: «Hay que hablar con todos los sectores y consensuar cumpliendo los plazos necesarios”, en lo que es un pedido explicito por finalizar con la conducción tripartita.