La reducción de costos salariales avanza a paso sostenido en las distintas actividades. Así como en muchos sectores se posa la espada de Damoocles de los despidos sobre la cabeza de los sindicalistas como moneda de cambio para abaratar la mano de obra, en otros la gestión recepciona voluntades que peregrinan para conseguir el beneplácito oficial a cambio de bajar los haberes de sus representados.
InfoGremiales reveló ayer que el Centro de Capitanes de Ultramar y Oficiales de la Marina Mercante le presentó un ofrecimiento a Guillermo Dietrich de un agresivo proceso de reducción de los costos salariales de sus propios afiliados. Ahora se suman otros sindicatos que firmaron un compromiso en sintonía.
El gremio que preside Marcos Ricardo Castro, hizo punta de lanza y propuso reducciones ente el 1 y el 12,5 por ciento de los diferentes ítems que componen el salario conformado de sus representados, a cuenta de promesas tan imprecisas y vagas como: “incremento de flota” o la “aprobación de la Ley de Marina Mercante”.
Este portal tuvo acceso a un acta compromiso rubricada por diferentes popes sindicales del sector marítimo que, entre otras cuestiones, se comprometen a evaluar la reducción de salarios y a modificar regresivamente el coeficiente de francos para ganar «competitividad».
El acta, también firmada por representantes del ejecutivo y de las cámaras de la actividad, cuenta con el avala del propio Marcos Castro, pero también la del secretario General de los Conductores Navales, Armando Alessi y el vicepresidente del Centro de Jefes y Oficiales Maquinistas Navales, Eduardo Mayotti, entre otros.
Los conocedores del paño le comunicaron a este portal que quien tendría preparado el próximo borrador de ajuste voluntario para sus propios afiliados para ser presentado ante Dietrich sería el Centro de Patrones y Oficiales Fluviales de Pesca y Cabotaje Marítimo, que lidera Julio Gonzalez Insfran, un amarillo de pura cepa.
De hecho la demora en la presentación del documento para ponerse en consonancia con el acta firmada con la gestión por parte de Gonzalez Insfran se debe a que el gremio está cerrando su proceso electoral, hecho que mantiene en stand by cualquier iniciativa hasta que se cierren las votaciones.