Las señales de reunificación parecen ser cada vez más fuertes. A las declaraciones públicas de distintos dirigentes de todos los espacios, ahora se le suman los contactos secretos, cada vez más frecuentes, con el objetivo de diseñar un camino de unidad que no sea demasiado abrupto.
La ruptura que se selló hace dos años, las posturas encontradas y las acusaciones cruzadas que se vivieron en este tiempo parecen estar llegando a su fin. Es que el perfil confrontativo entre los líderes sindicales comenzó a mermar.
Para comenzar a caminar la unidad, trascendió que el jueves último un almuerzo reunió a las cúpulas de la CGT Azopardo que comanda Hugo Moyano y a tres dirigentes peso pesado de la CGT oficialista.
Ese día José Luis Lingeri (Obras Sanitarias), Gerardo Martínez (UOCRA) y Andrés Rodríguez (UPCN), conocidos como parte de los «independientes» de la CGT que lidera Antonio Caló, se juntaron con el propio Hugo Moyano (Camioneros), Guillermo Perey-ra (Petroleros), Amadeo Genta (SUTECBA), Gerónimo Venegas (Peones Rurales), Oscar Mangone (Personal del gas) y Juan Carlos Schmid (Dragado y Balizamiento).
El debate giró en trazar un camino concreto para reunificar la CGT cuanto antes, para poder incidir de manera más sólida en lo que creen será el nacimiento de un nuevo liderazgo político.
En ese sentido, todos los sectores cegetistas saben que fracturados no tuvieron la capacidad de incidir en las políticas públicas, ni conseguir sus lugares deseados en puestos de gobierno, ni ubicaciones de privilegio en las listas de candidatos en los últimos comicios.
La idea sería realizar un cónclave sindical ampliado antes de fin de año, donde se comience a perfilar la idea de unidad y se produzca una foto de impacto. El regreso de una sola CGT.
Luego avanzarían en un documento conjunto con los temas de agenda sindical que hoy se encuentran sin respuestas y que son reivindicados por las tres centrales.
Finalmente el cierre sería aproximadamente en mayo de 2015 cuando se aprestarían a elegir una nueva conducción de unidad y consenso. No se descarta que se trate de un cuerpo colegiado y que se trate de dirigentes que hoy no conducen ninguna de las fracciones.
Además hubo acuerdo en invitar al sector de Luis Barrionuevo a este plan ya que consideran que de cara a 2015 «tienen que estar todos los sectores».
¿Será finalmente el proceso que concluya en la reunificación de la central obrera más importante de Argentina?.
Todos dicen que no habrá ningún tipo de condicionamientos políticos para ninguna de las partes, pero todo hace pensar que dentro de la CGT oficialista hará mucho ruido para quienes apuestan a candidatos del Frente para la Victoria en los comicios de 2015.