El secretario general del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (Smata), Ricardo Pignanelli, desmintió haber conversado con funcionarios del Gobierno Nacional sobre la posibilidad de realizar modificaciones al Convenio Colectivo de Trabajo ni tampoco de «ninguna flexibilización».
En declaraciones realizadas a FM Milenium, el dirigente sindical precisó que estuvo reunido con el «ministro de Producción, Francisco Cabrera, y el motivo fue que quieren elaborar un proyecto para apoyar la ley de autopartes para así poder llegar a producir anualmente un millón de automóviles».
«Para nada hablamos de modificaciones de convenios ni de acciones que rocen el convenio colectivo de trabajo. El tema fue exclusivamente un proyecto de levantar la producción, teniendo muy en claro que este año, de las 700 mil unidades que se vendieron, sólo se fabricaron 450 mil», añadió.
Además, sostuvo que en el marco del encuentro que mantuvieron con Cabrera, Pignanelli sostuvo que «tampoco se habló de ninguna flexibilización».
Al ser consultado sobre si hubo una oferta para discutir paritarias en función de productividad, Pignanelli afirmó que «no se habló de eso para nada», y sostuvo que, «en el tema producción y el nuevo método de trabajo», el gremio trabaja «continuamente».
En ese sentido, destacó que los convenios del sector «están actualizados» porque son discutidos «cada cuatro años», y subrayó que en ese marco fue «absorbida, discutida y consensuada la tecnología que vino entrando desde 2003, cuando se reactivó la industria».
En tanto, sobre la situación general de los trabajadores, el titular de Smata indicó que «hay gremios que están teniendo serios problemas» y sostuvo que «no hay una decisión económica del empresariado de colocar a la industria como eje del país y es un debate que tenemos que provocar».
Tras sostener que es «muy respetuoso de la CGT» pero que el Smata no está dentro de ella, Pignanelli señaló que la reunión sindical que tuvo lugar ayer en la ciudad balnearia de Mar del Plata «la convocó Luis Barrionuevo, pero a partir del 3 de febrero va a empezar a plantearse un tema general».
Finalmente y tras admitir que «en 2016 sufrimos licenciamientos y algunos destratos donde perdimos 3.000 puestos de trabajo sobre 90.000 que tiene el gremio», reafirmó que «el país no arrancó en lo que es la industria».