Será el puntapié inicial a la tercera ronda de negociación salarial de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) del año. Abel Furlán buscará llevar el 65% ya acordado a una cifra más cercana con la proyección inflacionaria interanual. Segundo test salarial de su gestión.
Esta semana en la sede del Ministerio de Trabajo de la Nación volverá a sentarse a la mesa de negociaciones uno de los gremios pesos pesados del país y del sector industrial en particular. Es que tiene cita para rediscutir sus salarios la poderosa Unión Obrera Metalúrgica (UOM).
La convocatoria formal de la cartera laboral es para el próximo miércoles 2 de noviembre. Ese día los conducidos por Abel Furlán se verán las caras con las cámaras empresarias de la actividad.
Antes de su derrota electoral, Antonio Caló había firmado el primer acuerdo del año. En aquel entonces rubricó unos, a la postre más que escasos, 45 puntos de incremento.
Una vez asumida la conducción de Furlán pidió rediscutir los haberes y luego de varios encuentros, que incluyeron movilizaciones de delegados, le adicionó 20 puntos porcentuales.
Este 2 de noviembre la intención del gremio, en el segundo test salarial de la era Furlán, es llevar esos 65 puntos a un número que esté más en sintonía con la inflación interanual, que hoy viene pegando cerca del 90%.
La UOM es uno de los gremios más emblemáticos de la CGT y de los más potentes en la industria. Su paritaria tiene alcance formal en más de 220 mil empleados formales registrados y un impacto importante como referencia para el resto del mercado de trabajo.