«Nuestra crítica a esa algarabía del binomio de la CGT que baja un paro por este acuerdo nos llama poderosamente la atención. En particular creo que detrás de eso hay alguna cosa más por la cual resolvieron bajar el paro», disparó el titular de una de las vertientes de la CTA Autónoma y abrió interrogantes sobre los intereses que se jugaban detrás de las negociaciones.
«Viste que hace unos días atrás el gobierno comenzó a plantear, cosas que estoy de acuerdo, es más, lo hago regularmente, que los dirigentes sindicales presentemos nuestra declaración jurada. Bueno, esto trajo mucho revuelo en la CGT y sé que hubo conversaciones entre el Gobierno y la CGT que no fueron públicas alrededor de este tema para que eso no prosperara», añadió el ceteísta.
Además, Micheli graficó que se trató de «una moneda de cambio», quien acenturó que «lo sabremos si en la ley de Ética Pública no aparece el tema de la obligatoriedad».
El referente de la CTA argumentó «que la gente tiene devaluado al dirigente sindical, nos tiene muy mal visto, somos de los que más imagen negativa tenemos» por cuestiones como las que negoció la CGT.