En el mes de febrero la compañía despidió a 150 empleados, lo que representa el 10% de su planta. Más allá de las versiones sobre los motivos y el futuro de la compañía, hace diez días firmaron con la Federación de Obreros y Empleados Telefónicos (Foetra) y el Ministerio de Trabajo la reincorporación de 20 de los trabajadores que no aceptaron el despido. Más de una semana después de retrasos por parte de la compañía, los trabajadores de Nextel con su conducción nacional de Foetra están en asamblea permanente en la sede central de la compañía.
El conflicto comenzó a fines de febrero con 150 telegramas inesperados. El sindicato de las telecomunicaciones que los representa desde comienzos de año (con anterioridad la telefonía móvil respondía a Comercio, como lo sigue haciendo en el único caso de la firma Claro), Foetra, denunció la medida unilateral y consiguió una inmediata conciliación obligatoria del Ministerio de Trabajo.
Dos meses más tarde, y tras la aceptación del grueso de los despedidos de la indemnización, la empresa, el sindicato y el Ministerio, con la representación directa de su Jefe de Gabinete, Norberto Chiaravino, firmaron un acta de reincorporación –en su momento de 20 trabajadores, y hoy por hoy, menos aún– que a la fecha la empresa no cumple.
Desde las 9 de la mañana del jueves, los trabajadores están en asamblea permanente, con el específico reclamo de que la compañía cumpla lo que firmó. En conversaciones con InfoGremiales, el Secretario Adjunto de Foetra, Claudio Marín, agregó desde el edificio de la compañía de Colón 525 que “encima amenazan con bajarse de la paritaria nacional”. Efectivamente, la empresa se negó por escrito en un expediente de los últimos días a convalidar a nivel nacional la paritaria firmada para la ciudad y la provincia de Buenos Aires.
Según destacó en su momento el consultor Alejandro Prince, los recortes de personal de Nextel se vinculan a las pocas perspectivas de crecimiento que tiene la empresa en la Argentina, especialmente luego de que no pudiera acceder al espectro radioeléctrico para ofrecer servicios 3G en el país. Sin embargo, desde la propia compañía señalaron que en 2013 la facturación de la compañía alcanzó los $3.000 millones y que tenían previsto implementar nuevas tecnologías en el país para el 2014. Mientras tanto circularon rumores sobre la retirada de la empresa del país y de nuevos despidos, pero por ahora nada de ello pasó a mayores.