El cambio de gestión en la localidad bonaerense de Moreno dejó una puja política en puertas, tras conocerse la decisión de Mariel Fernánedez, la nueva jefa comunal, de despedir a centenares de trabajadores municipales.  

Desde diciembre, los despedidos reclaman contra la intendenta en la puerta de la jefatura comunal. La mandataria asegura que los despidos son justificados por tratarse de cargos políticos otorgados por la anterior gestión. 

Las manifestaciones frente al palacio municipal de Moreno se han vuelto una moneda corriente en el último mes debido a la drástica decisión que tomó la intendenta Mariel Fernández de despedir a centenares de trabajadores municipales. Los despedidos piden ser reincorporados y amenazan con extender las medidas de fuerza de no obtener respuestas. 

El pasado lunes un grupo de trabajadores se concentraron en las puertas del municipio una vez más para llevar adelante un reclamo contra la gestión de Mariel Fernández. Reclaman que los masivos despidos realizados en el mes de diciembre fueron injustos y que corresponden a una persecución política. 

Protesta frente al municpio 

Pero a este reclamo se le suma las dificultades que tuvo la adminitración para afrontar el pago de salarios y aguinaldos, situación que provocó la reacción de los sindicatos que nuclea a los trabajadores municipales. Cabe resaltarse que la dificultades para hacer los pagos a principio de mes es una situación de arrastre, ya que el saliente intendente, Walter Festa, también tuvo que lidiar con ello. 

A pocos días del cumplimiento de los primeros dos meses de Fernández al frente del Ejecutivo, una de las fotografías que describe a este tiempo ha sido el permanente conflicto con los trabajadores municipales. Pese a diversas reuniones que se han llevado adelante para desactivar los reclamos, la solución no aparece. 


El argumento de la intendenta Mariel Fernández 

A la hora de explicar la sangría del personal municipal tras el cambio de mando, desde el municipio sostienen que trata de una baja de los empleados de "cargo político", que con la medida se busca darle prioridad a los empleados de carrera y que además se buscaba regularizar la situación después de apuntar contra Festa señalando que en el último año hubo 700 contrataciones. 

Por su parte, los trabajadores municipales despedidos ponen en tela de juicio "el criterio que se utilizó" para concretar el recorte, aduciendo que "hay persecución política". En este marco de opiniones contrapuestas es que se sigue desarrollando el conflicto. 

Asamblea de trabajadores municipales 

Un grupo de los trabajadores y el Ejecutivo se reunieron el 30 de enero para comenzar a dialogar sobre una salida pacífica. En este encuentro hubo una promesa de avanzar en otras reuniones por parte del municipio, pero los despedidos recalcan que no hubo continuidad. 

Es por eso que se volvieron a manifestar días atrás y se mantienen firmes en la idea de seguir concretando jornadas de protesta hasta que su reclamo sea atendido. Si bien las primeras manifestaciones fueron multitudinarias con el correr del tiempo la participación se fue apaciguando. 

La resistencia de trabajadores despedidos hacen referencia a que "hay miedo" por parte de muchos de sus compañeros por represalias que pueden llegar a tener por protagonizar la protestas. 

Fuente: Mundo Poder.