En el marco de la protesta para reclamar por los 250 mineros despedidos que llevan 80 días sin cobrar un peso ni de la empresa que los contrató ni del Estado, la Policía de Salta se llevó detenido a Ramiro Frías y a Cristian Torres, dos de los 250 mineros de EDVSA que en marzo pasado, al comienzo de la cuarentena, fueron despedidos.
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— Info Gremiales (@InfoGremiales) August 25, 2020
Detienen a mineros despedidos: se encadenaron a la Catedral y el gobernador Gustavo Sáenz les mandó la Policía. Ramiro Frías y Cristian Torres fueron detenidos
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Según consignó La Izquierda Diario, "alrededor de las 11hs Frías fue detenido junto a Torres, y se descompensó mientras lo intentaban subir a la camioneta de la Policía. Frías fue llevado en ambulancia al Hospital San Bernardo. Nadie informa a dónde se llevaron detenido a Torres."
Tras 80 días de reclamo sin ser tenidos en cuenta, ayer el propio Frías tomó la drástica decisión de literalmente coserse la boca en huelga de hambre.
Los 250 mineros quedaron en una especie de limbo legal producto de un efecto dominó que llevó al desastre actual. El Estado nacional le debe más de $ 40.000 millones a YPF, la mitad contraídos durante la gestión macrista que buscaba financiarse a través de sus contratistas. A raíz de la caída en las ventas y el precio del petróleo YPF pasa un momento crítico y en plan de ajuste, cortó la cadena de pagos con sus contratistas. EDVSA tenía el 70% de sus contratos con YPF y la empresa dejó de pagar salarios.
La Minera Mansfield, de capitales canadienses y peruanos, contrató a Electrificadora del Valle (EDVSA) para ejecutar la obra en la mina de oro Lindero. La subcontratada EDVSA, de origen neuquino con 26 años de servicio, cerró operaciones, dejando un tendal de deudas y salarios caídos en todo el país.
Como EDVSA dejó de pagar salarios, pero los trabajadores no cobran el ATP ni el IFE. El Estado apareció para mandarles a la Gendarmería para desalojarlos. La UOCRA, por el momento, en silencio.
"Es una vergüenza lo que está haciendo el Estado, nunca nos ayudó en nada, (el gobernador Gustavo) Sáenz se lava las manos, los de la UOCRA también, la secretaria de Trabajo no se pronunció", había denunciado Frías al programa La Voz del Obrero.
