La decisión que tomó la justicia acerca del levantamiento de la intervención del Sindicato Unidos Portuarios Argentino de Puerto General San Martin y el potencial regreso de Herme "Vino Caliente" Juárez tiene en ebullición la zona del cordón industrial del puerto santafecino. Se trata de un gremio con notable trascendencia a nivel nacional porque es el sindicato de portuarios más importante del país.

La situación es bien espesa. De hecho desde la Agrupación Celeste y Blanca, arco opositor de Juárez, manifestaron que es inviable la vuelta del ex dirigente, porque la Comisión Directiva que presidía más el órgano de fiscalización del gremio (revisores de cuentas) están en un completo estado de acefalia.

Ello se debe a que en septiembre de este año, 13 integrantes presentaron ante la Intervención judicial y ante el Ministerio de Trabajo, las renuncias a sus cargos. A esas decisiones, también debe sumársele el fallecimiento del Tesorero, hace aproximadamente un año.

De hecho de los 20 cargos a ocupar, solamente están vigentes 6 con una particularidad: tres de ellos son ocupados por integrantes de la familia Juárez. Se trata de Herme y sus dos hijos, Oscar e Ivana, quienes se encuentran procesados en la causa judicial que desencadenó las intervenciones de la Cooperativa de Trabajos Portuarios y del mismo Sindicatos.

A los tres los investigan la justicia por los delitos de Malversación de Fondos, Administración Fraudulenta y Lavado de Activos. 

En la movilización y cese de actividades de la semana pasada los estibadores se hicieron eco de esas situaciones. En muchos carteles pudieron observarse el pedido de convocatoria a elecciones libre y democráticas y un mensaje claro para las autoridades nacionales: "No permitan que nos vuelvan a dirigir delincuentes", "Juárez no nos representa", "toda la familia procesada.. y los van a dejar volver al SUPA?".