Los trabajadores metalúrgicos de Acindar Villa Constitución esperan una propuesta de la empresa que, hasta ahora, se mostró muy dura en el reclamo de reincorporar a los 12 empleados despedidos. Por eso también convocaron a una nueva marcha que ese día se solidarice con los obreros despedidos y genere la presión necesaria.
Frente a los argumentos de la baja en la producción, el miembro de la Comisión Interna de la fábrica y Secretario General de la CTA Autónoma local, Silvio Acosta, aseguró que “si ellos tienen que achicar costos y aumentar la rentabilidad, que lo hagan, pero no a costillas nuestras”.
“En la audiencia del día 16 no pasó nada, se volvieron a acentuar las posiciones”, relató Acosta. “No hubo ningún acuerdo, de hecho tuvimos varios encontronazos. Estuvimos discutiendo mucho que el sector de colada no puede trabajar con menos gente, que es donde viene trabajando el Comité de Seguridad de UOM”, explicó.
Sucede que el sector de colada continua es uno de los más castigados por los despidos y, a la vez, tiene altos índices de siniestralidad, por lo que trabajar con menos personal compromete la vida y la salud de los obreros.
“Nosotros vamos a todas las reuniones con expectativas porque la nuestra no es una posición cómoda, no nos gusta estar parando y haciendo marchas, nuestro lugar es adentro de la fábrica laburando. Por eso siempre que vamos a una reunión apostamos a que se resuelva, pero nos encontramos con que la empresa se está poniendo cada vez más dura. Esperamos que en esta cambie”, señaló Acosta.
El dirigente también apuntó las diferentes actitudes que se han tomado frente a la mediación del gobierno: “nosotros acatamos la conciliación obligatoria a rajatabla y la empresa no la acata. Nosotros arrancamos a trabajar normal y ellos siguen con los chicos afuera”.
En el camino de resolver esta crisis y lograr la reincorporación de los operarios despedidos, la marcha que convocan para el mismo día de la audiencia resulta fundamental. “Se está convocando a todo el mundo. Principalmente a todos los compañeros metalúrgicos que son los que tienen que encabezar, y después invitamos a todas las organizaciones que quieran participar en apoyo”, afirmó el dirigente.
El conflicto en la acería, se inició con el mes de julio, por el despido de doce operarios: 6 precarizados que tenían cerca de 4 años de antigüedad y a los que se les venció el contrato y 6 empleados de planta, con hasta 10 años de trabajo en Acindar. Tras seis días de paro, el Ministerio provincial dictó la conciliación obligatoria. No obstante, la desvinculación de los efectivos no es formal: nunca recibieron notificación alguna, simplemente se les impidió el ingreso y luego se les dio un régimen especial de licencia, pero la empresa los da por despedidos en las negociaciones y se niega a reincorporarlos.