Diputados de extracción sindical resultaron claves para la media sanción que obtuvo el nuevo proyecto de la Ley Bases en el Congreso, que incluye la reforma del Estado, las privatizaciones y la reforma laboral, entre otros puntos altamente perjudiciales para el mundo de las y los trabajadores. Queda pendiente su tratamiento en el Senado, donde se volverán a contar los votos para que Javier Milei, entonces sí logre las profundas modificaciones del país que busca.
En enero de este año, InfoGremiales contaba las sospechas de la CGT respecto al apoyo que podían obtener de los petroleros «Loma» Ávila y Claudio Vidal para bajar el DNU 70/23. Ambos llegaron en su momento al recinto como aliados de Juntos por el Cambio, actualmente uno es diputado y otro gobernador.
En el mismo mes, las preguntas de la central giraban en torno a Pablo Ansaloni y Carlos D’Alessandro, que ya se perfilaban para ser la pata sindical libertaria. Hoy ambos forman parte del bloque de La Libertad Avanza y celebraron la aprobación de la Ley Bases que incluye una reforma laboral regresiva.
El diputado nacional y secretario general del Sindicato del Petroleo y Gas Privado de Chubut, Jorge «Loma» Ávila, que supo tener un pasado combativo, en los comicios de 2023 militó y estuvo en la boleta de Patricia Bullrrich. El derrotero del espacio lo dejó tercero en su provincia pero igual arañó la banca desde la que hoy acompañó la Ley Bases a nivel general. Sin embargo, rechazó el artículo de las privatizaciones y la Reforma Laboral: «Se necesita una nueva ley, no modificaciones».
Con el gobernador de Santa Cruz Claudio Vidal, quien fuera dirigente petrolero, la situación es otra. El bloque de Por Santa Cruz está conformado por Sergio Acevedo, quien reemplazó a Vidal en su banca como diputado, y por José Luis Garrido. Para la media sanción del proyecto en general, Acevedo se ausentó a la hora de la votación, mientras que Garrido votó a favor. Acevedo luego quedó en la mira por votar a favor de la privatización de los Yacimientos Carboníferos de Río Turbio.
Luego quedan los diputado de extracción sindical que ya responden directamente La Libertad Avanza. Pablo Ansaloni, ex dirigente de UATRE de la mano de Gerónimo «Momo» Venegas, entró como diputado nacional en la provincia de Buenos Aires en la boleta con Carolina Píparo. Ansaloni ya estuvo en el Congreso entre 2017 y 2021. Estuvo en Cambiemos, después en el peronismo, massismo y ahora celebra con la Libertad Avanza.
En la UATRE, fue acusado de malversación de fondos y asociación ilícita, y expulsado del sindicato por haber desviado más de $ 10 millones de pesos a través de facturaciones irregulares, cuando administraba los fondos de la obra social (Osprera), una de las prestadoras médicas más grandes del país. En enero de 2021, causó controversia sus declaraciones antisemitas durante un discurso a miembros de su partido. Fue condenado por la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) por sus dichos. Se opuso a la legalización del aborto en Argentina, y voto en forma positiva la ley ómnibus que impulsó el Ejecutivo en febrero y hoy.
El otro es Carlos González D´Alessandro quien ingresó como primer candidato a diputado nacional por La Libertad Avanza en San Luis. Obtuvo casi 50% de los votos en las PASO arrastrado por la ola Milei. Estuvo vinculado a la Asociación Gremial de Computación (AGC), uno de los sindicatos de la estratégica industria informática. Se jactó de ser uno de los nexos de Milei con los gremios del PJ.