Para «confrontar» con Moyano el Gobierno desregula las revisaciones de salud e idoneidad para camioneros y hasta las empresas aseguran que «comprometerá la seguridad vial»

El Ministerio de Desregulación y la Secretaría de Transporte a cargo de Federico Sturzenegger eliminó la obligatoriedad de LINTI, una revisación de salud e idoneidad. La federación de empresas de transporte de carga Fadeeac asegura que su eliminación resentirá la seguridad. Con la Licencia Nacional de Transporte Interjurisdiccional los camioneros pagaban por capacitaciones para transporte de cargas peligrosas, zonas de riesgo, escolares y exámenes psicofísicos especiales para la actividad.

El Gobierno decidió eliminar la obligatoriedad de la Licencia Nacional de Transporte Interjurisdiccional (LINTI) para conductores de camiones de carga, una medida impulsada por el Ministerio de Desregulación y la Secretaría de Transporte.

Bajo la excusa de buscar reducir la burocracia y los costos para las empresas, simplificando los trámites que antes implicaban una revisión médica y de idoneidad realizada en clínicas asociadas al sindicato de camioneros. En 60 días, la medida entrará en vigencia y los conductores solo necesitarán su licencia de conducir para operar.

La Fadeeac, federación que agrupa a las empresas de transporte de carga, ha mostrado su oposición. Aseguran que la medida comprometerá la seguridad vial, ya que el LINTI incluía revisiones psicofísicas importantes para garantizar la aptitud de los conductores.

El LINTI, que implicaba un examen anual de manejo, con cursos para transporte de cargas peligrosas, pasajeros, escolares, zonas de riesgo y revisiones médicas, obligatorio para camioneros. Roberto Rivero, director ejecutivo de la federación, advirtió sobre las consecuencias de esta medida, señalando que “el truchaje está de fiesta” y comparó la formación de los camioneros argentinos con la de países europeos, donde los requisitos son mucho más estrictos.

En paralelo, el Gobierno también simplificó los trámites del Registro Único del Transporte Automotor (RUTA), haciéndolos electrónicos, sin costo y eliminando la necesidad de presencialidad. Además, se elevó el límite de capacidad de carga para el registro obligatorio de 700 kg a 3500 kg, reduciendo la cantidad de transportistas que deberán cumplir con esta normativa.