El Observatorio de Datos Económicos y Sociales de la CGT difundió su medición de inflación para enero de 2017. Según lo relevado por la central obrera la inflación del primer mes del año llegó a 1,80% y acumuló un 40,23% en el registro interanual.
Además la canasta básica se ubicó en $14.080, que es lo que necesitó una familia compuesta por dos adultos y dos hijos menores para no caer en la línea de pobreza, mientras que la canasta básica alimentaria, que mide la línea de indigencia, fue de $6.148,70 para una familia tipo.
Lo que generó sorpresa, y más en momentos del año en los que comienzan a mirarse los registros para sellar los acuerdos paritarios que comprenden a la mayor cantidad de trabajadores registrados del país, fue la diferencia con las cifras difundidas días atrás por el Indec.
Sucede que el nivel general del Índice de Precios al Consumidor (IPC) para la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y los partidos que integran el Gran Buenos Aires registró en enero una variación de 1,3% para el organismo que dirige Jorge Todesca.
Las mediciones de inflación se vuelven especialmente relevantes este año, porque de ellas dependerán las readecuaciones paritarias para los entendimientos que invoquen la famosa cláusula gatillo.
Incluso en el acuerdo «modelo» promovido por la gestión del Ministerio de Trabajo se habla de una adecuación trimestral según lo registrado por el Indec. ¿Qué sucederá si el Indec empieza a medir cifras sensiblemente inferiores a las que maneja la CGT?
Jorge Sola, director del Observatorio de Datos Económicos y Sociales y secretario de Prensa de la CGT, minimizó la diferencia aunque remarcó que seguirán de cerca el tema: «Por ahora no parece preocupante, pero vamos a seguir monitoreando los precios, al menos hasta que constatemos que este gobierno es confiable, si es que el gobierno demuestra que es confiable».
Además sostuvo que lo importante es recuperar los 5 puntos porcentuales de salario real que, en promedio, perdieron todos los gremios en las negociaciones salariales del 2016: «El ejemplo de los bancarios es bueno. Debemos conseguir (en paritarias) algo para recuperar los perdido y pautar este año con una cláusula gatillo», explicó.
Asimismo especificó que es fundamental que la cláusula de readecuación de los haberes se dispare automáticamente «porque sino hay que volver a juntarse y pasa lo que pasó con el acuerdo del Bono de fin año, algunos lo consiguen, otros lo demoran y otros nada».
En línea con lo registrado por la CGT, el Indice de Precios al Consumidor de la Ciudad de Buenos Aires registró en enero un incremento del 1,9 %, con un ritmo de inflación anual de enero es del 38 %.
Por su parte el Instituto Estadístico de los Trabajadores (IET) destacó que la inflación de enero había alcanzado el 1,6%, previendo que en los próximos tres meses superará el 2%.
El índice del Indec de enero también está por debajo de las estimaciones de las consultoras que habitualmente realizan sus propias mediciones. En este sentido, Rodolfo Santángelo, director de Macroview, había estimado que una suba del 1,7% era un buen número para enero, mientras que Luciano Cohan, de Elypsis, se volcaba por una variación más cercana al 2%.