La CTA Autónoma y la CTA de los Trabajadores fueron dos de las organizaciones que le dijeron que no en el Senado de la Nación al proyecto de reforma del régimen de Aseguradoras de Riesgos del Trabajo (ART). Por lo tanto no sorprende que ante la decisión del macrismo de avanzar por Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) en el tema, salgan a rechazar públicamente los resultados.
Para las centrales que conducen Hugo Yasky y Pablo Micheli el argumento es “frenar la litigiosidad”, pero el fundamento real es satisfacer «la demanda de los empresarios para profundizar la impunidad ante los daños que sufren los trabajadores y trabajadoras por la falta de prevención y seguridad en el trabajo».
«Con dicha medida anticonstitucional se avalan las Comisiones Médicas como nueva forma de restricción del derecho laboral y del control judicial. Esta avanzada significa una nueva ofensiva capitalista para bajar el costo salarial y de producción y favorecer la tasa de ganancia de las empresas», remarcaron ambas ramas ceteístas.
«En la Argentina todo se hace para atraer inversiones y por eso se busca bajar el salario, desconocer derechos laborales y, especialmente, contener y disciplinar el conflicto social», añadieron.
«Las centrales de trabajadores condenamos el Decreto y las formas autoritarias, inconsultas y anticonstitucionales del accionar del Gobierno de Macri y convocamos a la mayor movilización para frenar el atropello y el ajuste, ahora con la reforma por decreto del régimen de ART», sostuvieron.
Además, graficaron: «los trabajadores necesitamos prevención y seguridad en el trabajo, y no trabas para los reclamos ante las enfermedades y accidentes laborales».
Para Yasky y Micheli el DNU de Mauricio macri «significa un paso más hacia la flexibilización laboral», por lo que pidieron «una reunión de todas las centrales y del movimiento obrero para definir un plan de acción impostergable en defensa del salario, los derechos laborales y contra los despidos y suspensiones».