El Cotitular de la CGT, Pablo Moyano, aseguró que no hay clima de «efervescencia como para ir a la calle o a un paro general» y que por eso no se llenó de ollas el Congreso cuando los Senadores se aumentaron el sueldo a 9 millones de pesos. Sin embargo consideró que eso «se va a ir dando con los aumentos permanentes».
Pablo Moyano, el cotitular de la CGT y número 2 de Camioneros, evaluó por qué no hay más protestas y “efervescencia” en las calles contra el Gobierno, a pesar del ajuste implementado por el Gobierno y dio a entender que ese clima arrastra a las propias acciones que podrían emprender desde la propia central.
De hecho, se mostró sorprendido por la falta de reacción social con el aumento que decidieron los senadores, medida que generó fuertes cruces entre dirigentes políticos y del propio Javier Milei hacia la Cámara Alta.
«El termómetro fue hace 20 días. Cuando los senadores se aumentaron el sueldo a 9 millones, el Congreso se tenía que haber llenado de ollas y cacerolas. No salió nadie. Eso da una pauta de cómo está el clima social», ejemplificó en declaraciones a El Destape Radio.
En ese contexto, el referente sindical de Camioneros señaló que «muchos dicen que están en desacuerdo con este gobierno, insultan por la situación, pero otros dicen que hay que aguantar».
«Esa decepción y angustia que vive la gente es que no haya esa efervescencia como para ir a la calle o a un paro general. Creo que se va a ir dando con los aumentos permanentes de los servicios, de las tarifas y de lo que está pasando, pero hay una cierta angustia de la gente de querer proteger su trabajo y no salir, y ver hasta cuánto aguanta», analizó.
Aun así, subrayó la persistencia de movilizaciones para defender los derechos sociales y gremiales, y adelantó que muchos sindicatos respaldarán estas acciones. «Va a haber movilizaciones y una gran marcha universitaria. Hay que defender a todos los sectores de la sociedad y muchos gremios van a acompañar con una convocatoria amplia», dijo el cotitular cegetista.
Y señaló como «totalmente repudiable» el operativo policial en el Congreso que reprimió a los jubilados que se manifestaban en contra la política previsional y el DNU que veta la nueva fórmula previsional.
Moyano también expresó su rechazo a cualquier intento del Gobierno de restringir los aumentos salariales desde la negociación colectiva, y el rumbo que definió el ministro de Economía, Luis Caputo. «La CGT no puede ser cómplice de lo que manda el FMI a Caputo. Rechazamos cualquier tipo de techo a las paritarias. Tanto hablan de la libertad y te quieren poner paritarias de un 2%», repudió.