Unos 20 trabajadores que se desempeñaban en una obra de desagüe que se llevaba a cabo en Santo Tomé fueron suspendidos. Además, según se informó, se les adeuda el sueldo y el aguinaldo.
Los trabajos se desarrollaban en las calles Almaraz, entre Cibils y Santa Fe y estaban a cargo de la UTE entre las empresas Ponce y MEN ingeniería.
En diálogo con el móvil de la radio Aire de Santa Fe, José, delegado UOCRA reconoció que “la gente se encuentra desesperada”.
En el mismo sentido, explicó que “el 7 de enero, a la vuelta de las vacaciones, muchos trabajadores se encontraron con que estaban suspendidos. Están sin una moneda en el bolsillo”.
Asimismo, el gremialista denunció que la empresa “no se depositó las vacaciones. La última vez que se entregó dinero fue el 22 de diciembre”.
Por tal motivo, solicitan la reincorporación de los suspendidos. Mientras tanto, se encuentran en estado de asamblea permanente. Los trabajadores concurren al lugar de trabajo pero retienen las tareas. “La gente no tiene con qué venir a trabajar”, aseguró.