Luego de que el Ministerio de Educación le propusiera a los 150.000 trabajadores docentes universitarios una mejora anual del 28,4% en tres cuotas los gremios del sector agudizaron sus protestas.
«Es inadmisible el ofrecimiento, sobre todo si se consideran los niveles inflacionarios y el hecho que desde febrero se reclama la reapertura de la discusión salarial», puntualizó el secretario general del gremio, Ramón Marostica.
La organización decidió por lo tanto una jornada de protesta con paro de 24 horas para el martes 17 en las 30 facultades. Y requirió «el adelantamiento de los plazos, el aumento del porcentaje, la jerarquización, el cambio del nomenclador y la elevación del mínimo no imponible del impuesto a las ganancias», expresó Ricardo Mozzi, dirigente de la organización.
Por la FAGDUT participaron en la reunión Mozzi y Conrado Saller, además de las representaciones gremiales CONADU, CONADU Histórica, FEDUN, UDA y CTERA, en tanto por la parte empleadora lo hicieron el ministro Alberto Sileoni; el secretario de Políticas Universitarias Aldo Caballero; el Jefe de Gabinete de Asesores Daniel López y el vicepresidente del CIN (Consejo Interuniversitario Nacional), Roberto Tassara.
El secretario adjunto de la FAGDUT, Héctor Bianchi, explicó que los docentes universitarios aún no tienen un convenio colectivo de trabajo que garantice sus derechos y señaló que hace varios años se elabora un documento ya acordado entre los gremios y el CIN, pero que «el Consejo de Rectores obstaculiza su firma». El gremio exigió que el Poder Ejecutivo lo homologue de oficio y señaló que procura revalorizar a la universidad pública, por lo que se requiere generar «condiciones de trabajo dignas».