El personal de la firma Mondelez de la planta bonaerense de General Pacheco reclamó «la no aplicación de Ganancias sobre los salarios» y realizaba esta semana paros de dos horas por turno. La huelga parcial se da luego de haber decidido desde el sábado último «el no acceso y egreso de los camiones del establecimiento», informó la Comisión Interna.
En una asamblea, los empleados agrupados en el Sindicato Trabajadores Industrias de la Alimentación (STIA) determinaron un plan de lucha en rechazo de la aplicación de ese impuesto sobre los ingresos, que reclaman desde hace meses, y denunciaron que «los descuentos alcanzan en muchos casos los 250 mil pesos»
Los trabajadores también exigen «el cese de los despidos y mejores condiciones laborales», a la vez que el delegado gremial Jorge Penayo confirmó que el personal bloquea los ingresos y egresos de camiones ante «la ausencia de respuesta de la empresa y del Gobierno ante los tremendos descuentos sobre los salarios».
«La compañía tiene que hacerse cargo de los descuentos perversos ocasionados por Ganancias. A pesar de que hace 10 días hubo una resolución oficial sobre el tema, los trabajadores sufren los mismos descuentos que el 20 de julio último», afirmó.
Penayo sostuvo en un documento que en el contexto de la última devaluación y, ante el no reajuste de las paritarias, el personal «no puede ser la variable de ajuste».
Los delegados gremiales reclaman que no se aplique Ganancias sobre los premios, los plus y los incentivos, a la vez que rechazan «el aumento del 20 por ciento que ofrecen los empresarios en paritarias, porque sencillamente no sirve para nada».
Los trabajadores decidieron paralizar la producción durante dos horas por turno desde ayer, en tanto Penayo aseguró que determinados sectores políticos procuran «quitar todos los derechos que los trabajadores ganaron con la lucha permanente».
«Habrá asamblea permanente hasta que la empresa escuche. Los trabajadores de Mondelez hicieron campaña electoral a favor de Unión por la Patria (UXP)», dijo.
También enfatizó que «la compañía, competidora de Arcor, exporta a todo el Cono Sur, ya que el personal trabaja de lunes a lunes y produce marcas de primera calidad», y puntualizó que «este tipo de empresas ni siquiera pagan impuestos y, además, decidieron abonar a los trabajadores salarios de hambre», concluyó.