El próximo mes unos tres mil operarios metalúrgicos de Tierra del Fuego se quedarán sin trabajo de no mediar alguna gestión de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM). Son empleados que se desempeñan en fábricas de aires acondicionados de Río Grande y Ushuaia y por la propia modalidad de la producción se les renuevan sus contratos año a año.
Pero ahora esos convenios se caerán y en la UOM siguen la situación con especial preocupación: por el delicado cuadro de la industria. El gremio teme que esos obreros recuperen sus trabajos en el corto plazo.
Antonio Caló, titular del sindicato y también de la CGT oficialista, viajó el miércoles a esa provincia patagónica. «Claro que estamos preocupados, es mucha gente a la que se le termina su contrato de trabajo», dijo el líder metalúrgico.
Oscar Martínez, secretario general de la seccional Río Grande de la UOM y diputado nacional, completó: «No tenemos despidos ni suspensiones, solo hay finalización de contratos. El temor es que esos contratos no tengan continuidad como sucedió en otros años».
El año pasado, en plena ocupación, las industrias electrónicas y de Línea Blanca fueguinas daban trabajo a 15.000 personas. En la actualidad los ocupados son 12.000, detalló el diputado Martínez. Si los contratos no son renovados, la caída en el empleo sería aún mayor.
Por cuestiones estacionales, la mayoría de los fabricantes produce equipos de aire acondicionados desde fines de febrero hasta fines de noviembre, explicó Héctor Tapia, secretario general de la UOM de Ushuaia. Los principales fabricantes son las empresas BGH, New San, Carrier y Radio Victoria.
Caló adelantó que tramitará ante la Casa Rosada el pago de Repro, el subsidio que otorga la Nación para sostener puestos laborales y no despedir personal.
«Otros años no se pedían los Repro pero ahora sí para paliar esta situación de inestabilidad. La caída de estos contratos va a hacer mucho ruido», agregó Héctor Tapia.
El otro foco de preocupación de la conducción metalúrgica es la provisión de insumos para la industria fueguina, muy afectada en la actualidad por la escasez de dólares. Se entiende: si faltan insumos, el ritmo de producción es más lento y, por lo tanto, se hace más improbable que la industria vuelva a recontratar en lo inmediato a los trabajadores que perdieron sus empleos.
El diputado Oscar Martínez anticipó que la semana que viene intentará reunirse con funcionarios del equipo del ministro Axel Kicillof «para tener claridad sobre cómo va seguir la provisión de insumos para la industria».
Los dirigentes de la UOM de Tierra del Fuego necesitan respuestas del equipo económico para poder elaborar sus propias proyecciones de ocupación para 2015.