El senador del Movimiento Popular Neuquino (MPN), que llegó al Senado Nacional el año pasado tras ganarle una interna a la lista del gobernador Jorge Sapag, les pidió ayer a los senadores Aníbal Fernández y Marcelo Fuentes que haya modificaciones al dictamen.
Su crítica apunta a que “se avanza sobre el poder concedente que tienen las provincias y no alienta ninguna inversión”. «No tenemos que tener apuro para tratar una ley que debe sostenerse en el tiempo, frente a un nuevo paradigma de los hidrocarburos no convencionales. Tenemos que tener un marco legal previsible, serio, responsable”, planteó quien tiene a cargo los trabajadores de Vaca Muerta, el prometedor yacimiento de shalle oil.
El sindicalista sostuvo que el principal problema para atraer inversiones son “las condiciones macroeconómicas. Por ejemplo, esta ley podría haber discutido un tipo de cambio diferenciado”, propuso. Y afirmó que se necesita mucho más que los mil millones de dólares.
El principal reclamo del sindicalista es por el artículo 35 del proyecto, que menciona a “la autoridad de aplicación” con la facultad de prorrogar las concesiones. “Debe quedar taxativamente claro que esa autoridad de aplicación son las provincias”, exigió.
Tampoco coincide con darle prioridad a las empresas que ya tienen una concesión al momento de renovar un área. “Habíamos propuesto que no sea ilimitada, sino que que se prorrogara de no mediar mejor oferta. Que no sea en forma automática otorga más y mejor transparencia», explicó.
Con su decisión le restó al kirchnerismo el voto de los diputados Adrián San Martín y María Villar Molina, laderos de Pereyra. Con su negativa se diferenció del gobernador Jorge Sapag, quien tras varios tironeos se sumó al lote de mandatarios petroleros que apoyó la ley. “En toda negociación, cuando no se puede avanzar más hay que firmar o retirarse, y el gobernador ha optado por firmar. Pero no lo voy a cuestionar, porque él es el titular del Poder Ejecutivo”, cerró Pereyra.
Pereyra es un hombre fuerte de la CGT de Moyano, senador por Movimiento Popular Neuquino (MPN), pero viene de perder por gran margen la interna de la conducción del partido provincial.
El número dos de Moyano suena como posible candidato a gobernador, si bien viene de perder la interna del MPN. Además, Pereyra no quiere desatender a su gremio, que cuenta con 23.000 afiliados y una mutual de empleados petroleras de 60.000 asociados.