Luego de la represión que sufrieron durante la mañana del lunes, los trabajadores de Tatsa y Emfer decidieron tomar la fábrica. Mientras esperan el pago de sueldos atrasados y el aguinaldo, continúan denunciando el vaciamiento de la fábrica.
El lunes también fue detenido y liberado liberado el delegado Roger Castaño, en el marco del operativo realizado sin orden judicial. A las 18 horas se realizó una asamblea de trabajadores y un acto al cual se acercaron numerosas organizaciones, dirigentes gremiales, y trabajadores de distintos lugares, entre ellos de la fábrica autopartista norteamericana Lear, que también se encuentran en conflicto. El acto expresó la unidad y el apoyo solidario a los 450 trabajadores de Tatsa y Emfer que resisten bajo la consigna “SIN QUINCENA, SIN AGUINALDO, SIN TRABAJO: ESTATIZACION YA”.
En conversaciones con Info Gremiales, Ezequiel Peralta, delegado de Emfer, expresó que más allá de la solución por el atraso de sus haberes, van “por un proyecto de estatización de la fábrica para conservar las fuentes de trabajo que es el tema de fondo”. Explica que la empresa nunca tomó iniciativas de producción, y siempre se limitó a funcionar de acuerdo a lo demandado por el Estado. “Nosotros le hemos planteado al gobierno que reclamamos por nuestro trabajo, no el de la empresa”. También plantearon un proyecto de largo plazo de fortalecimiento de los trenes del tercer y cuarto cordón del conurbano.
“La empresa se está vaciando y la responsabilidad del Grupo Cirigliano es total. Lo que le estamos exigiendo al Estado es que de alguna u otra forma tome control sobre la empresa y sobre lo que está pasando con el vaciamiento de la fábrica”, indicó Peralta. Sin embargo, se lamenta que desde hace dos semanas, se cortó la comunicación con el Ministerio de Transporte que conduce el precandidato presidencial Florencio Randazzo.
En un comunicado, los trabajadores se explayaron sobre el comportamiento de las empresas del Grupo Cirigliano. “Desde hace un largo tiempo los trabajadores de Emfer y Tatsa estamos sufriendo grandes niveles de precariedad en nuestras condiciones de trabajo: atrasos en los pagos de nuestros salarios, cargas sociales patronales sin pagar a pesar de haber sido descontadas de nuestros recibos, dejándonos sin cobertura médica (lo que constituye delito de estafa) y la reducción general de los niveles de producción, que a esta altura no llegan ni al 10% de la capacidad instalada”.
Los trabajadores pertenecen a la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), cuyo Secretario General es el propio Antonio Caló, el líder de la CGT oficialista. El propio Caló intervino el viernes pasado proponiendo un desembolso de la caja del sindicato de $500.000, para brindar un adelanto de mil pesos a cada trabajador, que será devuelto el miércoles cuando el gobierno aporte los 7 millones de pesos totales.
Sin embargo, las simpatías a la propuesta de estatización provienen mayormente del arco político opositor de la izquierda y centro izquierda, como el MST-Nueva Izquierda y la CTA de Micheli, aunque incluye también al kirchnerista Movimiento Evita. En este sentido, Peralta indicó a Info Gremiales que buscan un apoyo “lo más amplio posible”, pues se trata de un emprendimiento nacional de industrialización que los trasciende a ellos mismos como trabajadores.