Representantes del gremio de mecánicos, Smata, se reunieron ayer por la tarde con el directorio de la planta ensambladora de motos Honda Guerrero y les pidieron que reincorporen a los dos empleados que fueron despedidos.
Además, los gremialistas denunciaron a la empresa que está ubicada en San Lorenzo ante el Ministerio de Trabajo por el intempestivo cierre de ayer, que se produjo sin aviso y alarmó a todo el personal.
El secretario general de Smata Rosario, Marcelo Barros, confirmó al diario local La Capital que «hubo una reunión con el directorio de la empresa» y que las partes tendrán en la jornada de hoy «una audiencia en el Ministerio desde las 11», donde el gremio solicitaría que se dicte Conciliación Obligatoria, para retrotraer el conflicto a foja cero.
También, Barros manifestó que «no era la forma de actuar de la empresa porque echaron a trabajadores sin avisar al gremio». Y agregó: «Les pedimos la reincorporación de los compañeros e hicimos la denuncia por los despidos».
Por lo pronto, según confirmó La Capital la fábrica hoy volvería a abrir sus puertas de manera normal y los empleados retomarían sus tareas habituales.