La política de cielos abiertos del macrismo ya comenzó a despertar preocupación entre los aeronáuticos, que lo expresan públicamente. El secretario general del sindicato de pilotos (APLA), Pablo Biró, sostuvo ayer que “este gobierno autorizó, en la modalidad de acuerdos bilaterales de reciprocidad a Copa, de Panamá, rutas a Córdoba, a Rosario, a Buenos Aires y nosotros no vamos a Panamá”. “Se explotan esos servicios, va a haber pasajeros que van a viajar y van a dejar sus divisas en compañías panameñas”, señaló Biró.
Además remarcó que “Colombia, vía Avianca, desembarca acá de la mano del papá del presidente”. Es que Avianca casualmente compró MacAir, la aerolínea de la familia Macri, en el pasado marzo, días antes de quedarse con un gran negocio de vuelos internacionales desde el interior .Y ahora desembarcará en el cabotaje.
“Sin reciprocidad, le dieron a Avianca la explotación de Córdoba y de Rosario, por eso reventaron Sol”, graficó el piloto en declaraciones a Radio Del Plata, conectando el ahogo financiero a la aerolínea de cabotaje con la llegada de la firma colombiana.
“En diciembre lo que va a pasar es que le van a dar parte del cabotaje” a Avianca, agregó Biró y señaló que “como país no se le exige nada a las transnacionales y les dan todo”.
Por otro lado, el piloto negó hoy que Aerolíneas Argentina haya reducido su costo operativo por una buena gestión y aseguró que la baja fue sólo por la caída del petróleo.
Con duras críticas, Biró analizó la gestión de Isela Costantini al frente de la aerolínea de bandera y denunció que hay «operaciones de prensa» para evitar que los pilotos realicen reclamos salariales en línea con la inflación real.
La empresa dejó trascender que ya usó el 78% de su presupuesto al gastar en lo que va del año 3.288 millones de pesos de los 4.224 millones que tiene disponibles para 2016; y también que se analizan medidas alternativas para bajar el déficit.
Biró dijo que no le «sorprende» que esa información haya aparecido en los diarios justo cuando la Asociación de Pilotos Líneas Aéreas (APLA) esté por iniciar sus reclamos para mejorar los salarios.
Los gremios aeronáuticos iniciarán en agosto las discusiones salariales por primera vez con la gestión de Costantini dado que la paritaria que está en vigencia vence el 31 de ese mes y el nuevo acuerdo debe regir desde el 1 de septiembre.
Costantini deberá sentarse a la mesa de negociación con los secretario generales de los gremios de pilotos (APLA y UALA), de aeronavegantes (AAA), de personal superior (UPSA) y de empleados en tierra (APA).
El piloto explicó que el presupuesto en pesos de Aerolíneas Argentinas para este año fue aprobado por el Congreso en 2015, cuando el valor oficial del dólar era de 9,50 pesos, mientras que desde inicios de 2016, es de en torno a 15 pesos.
«Más del 40% de los gastos de Aerolíneas son dolarizados, por lo que la devaluación le subió un 50% en pesos la necesidad financiera de la empresa», dijo el gremialista al explicar por qué creció la necesidad financiera de la compañía estatal.
Consideró entonces el sindicalista que la ejecución del 78% del presupuesto en lo que va del año responde a que cuando se hizo el presupuesto el dólar estaba un 50% más barato y no a que hayan aumentado los costos de la empresa.
«A Aerolíneas le falta dólares para pagar sus insumos producto de la decisión que tomó este Gobierno (de Mauricio Macri) de devaluar y no ajustar el presupuesto», dijo el sindicalista en declaraciones a Radio Cultura.
Biró agregó que «es una mentira» que la gestión de Costantini haya logrado un ahorro por una mejor administración de la firma en comparación con la gerencia anterior, que estaba en manos de Mariano Recalde.
«Es una mentira que la gestión de Isela haya conseguido ahorro. El año pasado, el kerosene JP (combustible usado por los aviones) estaba 1,10 dólares y ahora vale 40 centavos de dólar. El supuesto ahorro de 300 millones de dólares tiene que ver con la baja del combustible», dijo Biró.
Insistió entonces que «no hubo ningún ahorro» sino que eso se produjo por «factores exógenos a la compañía» como lo es la baja en el valor del combustible que usan los aviones propios y alquilados por la firma estatal.