El porcentaje de trabajadores pobres pasó de 15,5% en 2015 a 27,4% en la actualidad. Es por el impacto de la crisis macrista y de pandemia de acuerdo a los datos de la Encuesta de la Deuda Social Argentina. Además hay un 4,4% de trabajadores que perciben sueldos por debajo de la línea de la indigencia.
El Observatorio de la Deuda Social Argentina de la Universidad Católica Argentina (UCA) dio a conocer el informe completo titulado “Efectos de la pandemia Covid-19 sobre la dinámica del trabajo en la Argentina urbana”, el cual arrojó que, por impacto de la crisis económica del macrismo y pandemia, el porcentaje de trabajadores pobres pasó de 15,5% a 27,4% (11,9 puntos porcentuales) en los últimos 5 años.
Además se verificó el crecimiento de un fenómeno todavía peor. Es que pasó de 1,9% a 4,4% el porcentaje de trabajadores que directamente son indigentes.
En ese marco, el estudio indicó que el incremento fue significativamente más intenso entre los trabajadores que viven en hogares del estrato “trabajador integrado y del estrato marginal”, que residen en el conurbano bonaerense, entre las mujeres y entre trabajadores en edades centrales (35-59 años).
Un trabajador pobre se define como cualquier persona ocupada que trabaja, (más allá de si lo hace por su cuenta, o es asalariada, en el sector formal o informal), y vive en un hogar pobre por ingresos, es decir, que no alcanza a cubrir la canasta básica total.
Según consignó Ámbito Financiero, la serie de la investigación comenzó en 2010: ese año, el 17,7% de los trabajadores era pobre. El número bajó y para el 2015 se ubicó en 15,7%. A partir del 2016 comenzó a subir, bajó en 2017, y desde el 2018 “marcó un punto de inflexión”.
Con la crisis cambiaria se disparó hasta llegar en 2019 a 27,2% y en el año de la pandemia, se mantuvo en 27,4%.