Se confirmó la temida reducción en las plazas para investigadores “de carrera” en el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) para el año próximo, a partir de la aprobación de la Ley General de Presupuesto, el miércoles pasado, con su fuerte reducción presupuestaria que dispone para las áreas de ciencia y técnica.
De acuerdo a los datos que se desparramaron desde varios sectores, el número de investigadores nuevos para el año próximo sería de 385, frente a los 943 del periodo anterior.
La directora del CONICET en el área de Ciencias Sociales y Humanidades, Dora Barrancos, confirmó a al sitio NEXciencia que “lamentablemente va a haber un 60 por ciento menos de ingresos a la carrera que en el año 2015”.
La destacada socióloga aproximó el estado de situación: “Los que van a ingresar pueden ser un poco más de 400 incluyendo a los investigadores que ingresan desde el exterior”. Y sostuvo que “esta reducción es la consecuencia de la regresión que significa una caída presupuestaria que supera el 30 por ciento. Lo veníamos diciendo desde que conocimos el proyecto de presupuesto que elaboró el Poder Ejecutivo”.
La denominada “carrera del investigador” es la principal herramienta con la que cuenta el Estado para fomentar la dedicación exclusiva de los científicos para el desarrollo de sus tareas y direccionar la investigación a las necesidades del país.
Durante el menemismo, los ingresos a la carrera fueron suspendidos y, posteriormente, en el gobierno de la Alianza, no mejoraron las expectativas: el “plan Caputo” estuvo a punto de eliminar la carrera. Las políticas implementadas en los 90 llevaron a que hubiera unos 3.000 científicos en el CONICET en el año 2002, con ingreso cero a la carrera del investigador científico. Un año después se retomaron los ingresos con la incorporación de cerca de 400 investigadores. En 2015, el número de investigadores del CONICET era de más de 9.000.
El contrapunto de la fuerte reducción del ingreso de nuevos investigadores está en nada más ni nada menos que el Plan Argentina Innovadora 2020, un marco que define a la ciencia y la tecnología como política de Estado. El Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva elaboró e implementó esta herramienta hace tres años, en 2013. Entre varios enunciados, se estableció como meta elevar la planta de científicos a 10.000 en 2015 y llegar a 15.000 en 2020, lo que supone un crecimiento aproximado de 10 por ciento anual en la cantidad de ingresantes. En cambio, se registrará una baja de 60 por ciento respecto de la meta anual.