La semana pasada, luego de una audiencia de mediación el Ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria en el conflicto que enfrenta e los portuarios (SUPA) con la Terminal Puerto Rosario (TPR). Inmediatamente, la empresa retrotrajo su accionar permitiendo otra vez el ingreso de los delegados sindicales al predio. Pero desde el gremio desconocieron la medida oficial y hasta hoy sigue sin haber actividad de carga y descarga en los muelles.
Ante la desobediencia del SUPA, el Ministerio de Trabajo de la Nación volvió a convocar al gremio para intentar que acate la decisión tomada, pero si bien hay negociación de partes hasta anoche continuaba el paro por tiempo indeterminado.
El gremio estibador denuncia una serie de incumplimientos de condiciones laborales de la empresa, que TPR niega de plano y señala que lo único que abona con retraso es la cuota sindical.
Por su parte la firma avanzó y denunció penalmente a los sindicalistas por las amenazas de muerte que recibió un director el jueves pasado por lo que la situación comienza a complejizarse.
Los empresarios dicen que esta medida gremial ya generó millonarias pérdidas de dinero por la falta de actividad de la empresa. Esperan que los puentes tendidos entre la cartera laboral y el sindicato logre destrabar el conflicto.