Los trabajadores de maestranza de la empresa tercerizada La Mantovana, que presta servicios de limpieza en las sedes del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto, continuaron ayer las protestas en demanda de mejores condiciones laborales y en rechazo de despidos.
El personal está agrupado en el Sindicato de Maestranza y Mantenimiento (SITMMA) y en ATE y lleva más de cincuenta días de conflicto con esa empresa tercerizadora del servicio de limpieza.
La compañía está obligada por contrato a que los trabajadores cumplan una jornada laboral de ocho horas, pero de los 160 empleados 47 no están encuadrados en ese requisito y trabajan cuatro horas diarias por un ingreso de 3.800 pesos.
Los trabajadores decidieron profundizar las medidas de acción directa a partir de «despidos masivos e injustificados y avisos de traslados de delegados a otros sectores» de la actividad.
El personal continuó ayer el cese de tareas dispuesto por tiempo indeterminado y protestó por la mañana en el edificio de Arenales y Esmeralda en defensa de «la totalidad de los puestos laborales».