La Asamblea de trabajadores de Agea votó, ayer, continuar con el quite de colaboraciones en el marco del proceso de convergencia entre papel y web que realiza el multimedios, hasta tanto la empresa dé respuestas ciertas y establezca plazos concretos sobre los reclamos entregados por la Comisión Interna.
En el pedido de los delegados se destaca la regularización de las condiciones precarias de trabajo que hay en la empresa, con la prioridad puesta en los trabajadores del diario La Razón, que cobran sueldos de 3.500 pesos y entregan facturas como monotributistas.
Por otro lado, se exige un aumento de sueldo que compense el poder adquisitivo en plazo perentorio. Y que la política de sueldos tienda también a una convergencia salarial para que se pague igual a las personas que desarrollan tareas similares.
La política antisindical de Clarín tiene correlato en las redacciones, pero se extiende también a los trabajadores gráficos que estuvieron en conflicto hasta hace unos días y a los trabajadores de televisión que buscan ser reconocidos e incorporados al convenio colectivo de trabajo correspondiente.