Los empleados cortan desde las 6 de la mañana la calle Uruguay al 3.900, en el Acceso Tigre, y según indicó Camilo Mones, ex delegado de Pepsico e integrante del Movimiento de Agrupaciones Clasistas (MAC), la protesta «se repetirá a las 14 y a las 22».
«Las protestas y el paro son en reclamo de las condiciones laborales y la baja de producción de una línea, en particular de chicles Beldent, que ya fue reemplazada por importaciones provenientes de Brasil», contó Mones a Télam.
También contó que se produjo «un despido acompañado de invitaciones a retiros voluntarios que los trabajadores no quieren aceptar porque no tienen a dónde ir y no quieren perder su fuente laboral».
En la actualidad se desempeñan en la planta de Victoria un total de 800 trabajadores y según los empleados «las condiciones laborales empeoraron sustancialmente el último año así como las intimidaciones, especialmente del personal de seguridad que cachea a los trabajadores al ingreso y al egreso de la planta».
En el mismo sentido denunciaron que «la multinacional norteamericana, con el objetivo de amedrentar a los trabajadores y su comisión interna que votaron democráticamente la medida de paro ejerciendo su derecho constitucional de huelga, contrató este personal ajeno a la seguridad habitual de la planta, actuando como verdaderos patovicas que incluso agredieron físicamente a los delegados».
Esta situación fue la que derivó en el primer despido, que según denuncian los trabajadores, «se trata de un empleado que hacía 10 años que trabajaba en la fábrica y que fue echado por una discusión con un personal de este tipo».
En la planta, que fue adquirida por Kraf, Stani y Terrabussi, se producen en la actualidad las marcas Beldent, Wolls (caramelos), Mantecol, Bazuca, y otros caramelos, chicles, chocolates y chupetines.