Mientras se cumple el tercer día de quite de colaboración de los trabajadores del ferrocarril Sarmiento, el secretario general de la Unión Ferroviaria, Sergio Sasia, fue convocado a una audiencia con el ministro de trabajo Carlos Tomada y la viceministra Noemí Rial a la sede del organismo ubicada en Alem al 600.
El objetivo del encuentro entre la conducción del gremio y las autoridades de Trabajo es destrabar el conflicto que enfrenta al delegado disidente de la Unión Ferroviaria, Rubén “Pollo” Sobrero, con el ministro del interior y transporte Florencio Randazzo. La reunión comenzará a las 12:30 horas y se espera que se presenten alternativas para viabilizar soluciones a las demoras que sufren los pasajeros de ese ramal.
La medida de fuerza ,que hoy cumple su tercer día, se desató porque los empleados del Sarmiento sostienen que hace dos años y medio que reclaman el pago de una indemnización por el cambio de razón social de la empresa. Ese pedido se funda en que en situaciones similares los trabajadores del Belgrano Sur, del San Martín y del Roca la cobraron. “Si fue para ellos, tiene que ser para todos”, dice Sobrero. El monto total reclamado asciende a la friolera de 300 millones de pesos.
Como contracara el ministro del interior y transporte, Florencio Randazzo, declaró que el paro es una maniobra extorsiva del dirigente gremial y que es una locura que “reclamen una indemnización de 300 millones de pesos por haber pasado de TBA al Estado, cuando no se les tocó ni la antigüedad, ni las vacaciones ni ningún otro beneficio adquirido”.
Según el ministro los montos que se abonaron a trabajadores de las líneas que señala Sobrero no fueron en materia de indemnizaciones, sino que lo hicieron en materia de gratificaciones por productividad. No hay indemnizaciones porque “Nunca estuvo en riesgo la continuidad laboral, y no hubo ni un solo despido”, enfatizó.
Desde la conducción nacional del gremio sostienen que el dinero que percibieron los trabajadores del Belgrano Sur, del San Martín y del Roca no está vinculado a indemnizaciones por el cambio de razón social de la empresa, sino que se trata de gratificaciones. Además, exhortan a los delegados disidentes a dejar sin efecto las medidas y a colaborar para retomar la paz social.