El titular del gremio de encargados de edificios, Víctor Santa María, habló de los convenios colectivos de trabajo, un tema tabú entre los gremialistas y pidió actualizarlos: «Todavía hay convenios colectivos de trabajo que son del año 75, y eso atrasa». Y agregó: «Debemos volver nuevamente a ser vanguardia y no retrasar».
El jefe del Sindicato Único de Trabajadores de Edificios de Renta Horizontal (Suterh), Víctor Santa María, se metió en un tema que se convirtió en tabú para los sindicalistas y avaló la idea de actualizar los convenios colectivos de trabajo.
Según Santa María, «el sindicalismo siempre estuvo a la vanguardia del trabajo, especialmente del 50 hasta mediados de los 80, principios de los 90. Fue un sindicalismo que sabía de los temas, se adelantaba y podía proponer cosas. A partir de los 90, el sindicalismo se quedó atrás de los problemas. Fue un camión de bomberos que fue apagando los incendios que la realidad le impuso al mundo del trabajo».
Y agregó: «Todavía hay convenios colectivos de trabajo que son del año 75, y eso atrasa. Hay que discutir esos temas, lo digo como sindicalista». La frase es polémica y genera gran controversia en el mundo sindical.
En declaraciones a Perfil, el también titular del Grupo de Medio Octubre, sostuvo: «Debemos volver nuevamente a ser vanguardia y no retrasar».
Además, Santa María habló de lo que a su criterio es la falta de Norte del movimiento obrero: «El último gran documento del sindicalismo fue el de Saúl Ubaldini con los 26 puntos para la Unión Nacional de la CGT. El sindicalismo no volvió a discutir el Estado que quería, los problemas que veía, la solución posible. Era un movimiento obrero preocupado por el pago de la deuda, que también dificultaba el desarrollo de los trabajadores».
Para el «portero» el movimiento obrero se desideologizó y «eso demuestra la gran división».
«Gran división que aumentaron las desigualdades. No es la misma desigualdad de los años 70/80 que la de principios del siglo XXI. Eso también afectó al sindicalismo. El movimiento obrero es lo que representan sus dirigentes. No creo que haya dirigentes sindicales que no tengan conciencia de su base social. Pero la base social de un trabajador metalúrgico hoy no es la misma que en los 70″, concluyó.