La Federación Marítima, Portuaria y de la Industria Naval (Fempinra), que lidera Juan Carlos Schmid, celebró la derogación del decreto 870/18 impuesto en su momento por la gestión de Cambiemos y luego de cinco años «de intensa lucha». Aseguraron que ese decreto ponía en riesgo fuentes laborales de la actividad.
«La conquista fue posible a partir de la férrea voluntad y la unidad de acción. Desde un comienzo el gremio fue intransigente en rechazo de estas políticas que arriesgaban las fuentes laborales y alentaban el desguace definitivo del puerto metropolitano», aseguró Schmid.
Un documento de la Fempinra exaltó la decisión oficial de derogar el decreto, en especial a partir de «la incansable gestión de la ministra de Trabajo, Raquel Olmos», y explicó que el macrismo determinó el uso de una única terminal operativa portuaria.
La decisión del Gobierno fue adoptada de forma conjunta por varios ministerios, que coincidieron en señalar que «se avanzará ahora en la aprobación de los pliegos, el llamado a licitación y la posterior adjudicación del uso y operación de dos terminales del Puerto de Buenos Aires, interior y exterior, manteniendo todos los puestos de trabajo».
La medida fue publicada hoy en el Boletín Oficial, en tanto Schmid reseñó que en 2018 la Fempinra logró sostener los empleos en esa terminal «con resistencia y lucha», pero mientras tanto el gobierno de Mauricio Macri aplicó «un dispositivo legislativo que implicó otra vez el resquebrajamiento de la golpeada estructura portuaria».
También remarcó que la respuesta a esa situación «fue contundente a partir de la unidad, organización, los paros y movilizaciones, que evidenciaron la firmeza gremial ante un decreto considerado muy nocivo para el comercio exterior del país».
«El lobby empresario y la política de amiguismo fueron funcionales al modelo de exclusión productiva e integración vertical promocionado por el macrismo», apuntó Schmid, quien consideró que el triunfo del Frente de Todos (FdT) en 2019 recuperó «la confianza para revertir una situación que ganó terreno por la incertidumbre».
«Pero a pesar de los canales de diálogo permanente, la dilación política fue una constante, por lo que la Fempinra retomó la lucha bajo la consigna ‘El puerto no se vende, se defiende’. Hubo protestas hasta que en 2020 el exministro de Transporte Mario Meoni dejó caer la apertura de los pliegos de licitación, por lo que la Fempinra retomó la lucha callejera en demanda de la derogación del decreto 870», afirmó.
Schmid destacó en especial la reunión mantenida en abril último en Casa de Gobierno entre el Jefe de Gabinete, Agustín Rossi, Olmos y el ministro de Transporte Diego Giuliano, quienes confirmaron que el decreto de la gestión Cambiemos sería derogado.
En el Boletín Oficial, el Gobierno nacional destacó de forma taxativa que «con esta medida se garantizan las fuentes de trabajo, evitando el monopolio en manos extranjeras del principal puerto de contenedores del país y potenciando la competitividad de la terminal».
El Ministerio de Transporte a cargo de Giuliano avanzará ahora en el llamado a licitación para el uso y operación de dos terminales del Puerto de Buenos Aires, luego de haber oficializado el decreto 299/23, que derogó el anterior 870/18 del macrismo.
Esa cartera de Estado informó en un comunicado que la Administración General de Puertos (AGP), a cargo del interventor José Beni, adecuará los contratos de concesión vigentes en las terminales 1, 2, 3 y 4 para asegurar «una correcta transición en el proceso hasta que se adjudique finalmente el servicio a los nuevos concesionarios».