La Junta Interna de ATE en el Indec realiza informes con los datos oficiales relativos a los intereses de las y los trabajadores. En este caso actualizaron la Canasta de consumos mínimos. En otras palabras: ¿Cuál debería ser el salario mínimo?
En el informe, los trabajadores del Indec, indicaron que realizan el ejercicio «con la finalidad de establecer el valor de una canasta que cubra las necesidades de una familia tipo y debe utilizarse como base empírica para exigir un piso salarial.»
«A este valor llegamos en base al uso de datos oficiales publicados por el INDEC: Un Hogar constituido por una pareja de 35 años con dos hijxs en edad escolar necesitó, en diciembre de 2020, de $ 82.085,9.- para satisfacer sus necesidades. Este valor se compone de $ 27.586,3.- necesarios para adquirir una Canasta Alimentaria Mínima y de $54.499,5.- para acceder a otros bienes y servicios básicos.»
«Las canastas utilizadas para este ejercicio no son las utilizadas por el organismo para la medición de la pobreza, que este mes llegó a $ 54.208. para una familia tipo, sino que son las llamadas “Canastas de Consumos Mínimos” y surgieron como propuesta metodológica innovadora en el INDEC, aunque todavía no se han aplicado en las mediciones oficiales.», aclararon.
Hay quienes utilizan este valor para decir que el salario mínimo debería ser entonces la mitad de $ 82.085,9.-, asumiendo que entran dos salarios al hogar pero debido a los distintos formatos familiares, a la falta de empleo o a la imposibilidad de delegar tareas de cuidado esto puede no suceder.
En ese sentido, desde ATE Indec aclararon: «Estas canastas indican un piso para que cada asalariadx esté en condiciones de cubrir las necesidades básicas de su núcleo familiar y, de esa manera, no ser susceptible de caer bajo la línea de pobreza. Por tanto, ningún trabajador debería ganar -de bolsillo- menos que el valor calculado en este ejercicio.»
Así mismo, piden que el aumento final del año 2020 para los estatales «sea acorde a la inflación acumulada a diciembre, que fue del 36,1%. Lo contrario sería postergar la pérdida del poder adquisitivo de lxs trabajadorxs del sector.»