Escenas de alta tensión se viven por estos días en los edificios de la avenida Alem donde funciona la actual Secretaría de Trabajo, debido a la determinación del Ministro Dante Sica para eliminar todos los restos de la gestión Triaca en el entonces Ministerio.
Varios funcionarios residuales de la gestión de Triaca, sobre todo en las áreas administrativas, se enteraron en la puerta de ingreso que estaban despedidos y tuvieron que hacer gestiones varias para poder encontrar una explicación al respecto la que, cuando la obtenían, solo era la ratificación de la medida por decisión del Ministro.
Muchos de ellos orbitaban en el universo del poderoso secretario administrativo de la gestión anterior -Esteban Eseverri- que pese a su retirada antes de la navidad había dejado en lugares sensibles al movimiento administrativo a gente de su equipo como Silvia Rodriguez al frente de RRHH (cargo de peso en estructura de mas de 4000 empleados) y Verónica Sanchez Troillet y Juan Galvanisi, ambos ubicados por Eseverri en el sensible manejo de recursos y contratos que el entonces Ministerio recibía por los programas de financiamiento externo (Contratos PNUD, FLACSO, etc) y que son una caja casi discrecional para el manejo de situaciones puntuales. Todos los nombrados hoy engrosan las estadísticas de desocupados.
También fue corrido Oscar Leguizamon, otrora jefe de gabinete de Triaca, el cual era una extensión dentro del Ministerio de uno de los mas escurridizos y enigmáticos jefes sindicales, el secretario de los trabajadores del Gas -Oscar Mangone-, famoso por su ultra bajo perfil al punto que es casi imposible encontrar imágenes de él.
Desde la Secretaría se filtran comentarios que mancharían el registro del ex ministro pues apuestan a que si Sica mira en fino algunas actuaciones administrativas de Triaca va a encontrar varios episodios parecidos al que hiciera conocida a «Sandrín». Sin embargo, por ahora, todo parece ser mas una forma de subrayar los nuevos tiempos que vocación de investigar el pasado reciente.