La Asociación Trabajadores de la Educación (ATEN) resolvió prolongar cinco días más el paro, tras fracasar las negociaciones con el gobierno para fijar una pauta de salarios para este año.
El gobierno provincial otorgó por decreto el aumento a los docentes aplicando una fórmula de ajuste para el primer trimestre del año según un promedio de los Índices de Costo de Vida (IPC) de Córdoba, Indec y de Neuquén siguiendo el criterio acordado con los gremios de ATE, UPCN y Viales provinciales.
ATEN realizará nuevas protestas públicas durante esta semana y participará activamente de la marcha federal convocada por la Ctera el miércoles próximo en la ciudad de Buenos Aires.
Por su parte, las Defensoras del Niño y Adolescente Mónica Palomba, Marcela Robeda, Andrea Rappazzo y Paula Castro Liptak presentaron hoy una medida “urgente a favor de todos los niños y adolescentes que se encuentran sin clases en el ciclo lectivo del año 2018 en todos los niveles inicial, primario y secundario».
Las Defensoras solicitaron que se intime «al gobernador y la ministra de Educación para que arbitren los mecanismos necesarios para garantizar el dictado de clases del presente ciclo lectivo», y pidieron que «el restablecimiento de las clases sea en un plazo perentorio de 48 horas».
También solicitaron que “se imponga una sanción conminatoria, equivalente a 5000 pesos por cada día de demora, a partir de la notificación a los responsables de garantizar el derecho a la educación”.
Por otro lado, el Sindicato de Profesionales del Sistema Público de Salud (SIPROSAPUNE) decidió extender cuatro días más la huelga iniciada hace tres semanas en rechazo al Convenio Colectivo de Trabajo firmado por el gobierno con la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) y la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN) y que la Legislatura convirtió en ley en el día de ayer.
Los profesionales cuestionan varios artículos de la ley que modifican y afectan el régimen “full time” en los hospitales y centros de salud de la provincia.
En tanto, en Arroyito, a 40 kilómetros al oeste de la capital, el viernes por séptimo día consecutivo, trabajadores de la Planta de Agua Pesada (PIAP) realizaron cortes intermitentes en la ruta nacional 22, por atraso en el pago de sus salarios y por la reactivación del complejo que provee agua pesada a los reactores de las centrales nucleares argentinas.