Las cámaras empresarias bancarias y el gremio volvieron a fracasar en las negociaciones paritarias del sector, durante una audiencia realizada ayer en el Ministerio de Trabajo, en unas negociaciones que ya se convirtieron en un caso testigo de lo que puede ocurrir en materia salarial para 2018.
En el encuentro celebrado en dependencias de la Dirección Nacional de Relaciones laborales, a cargo de Adolfo Saglio Zamudio, las cámaras empresarias, después de dos meses de estar plantados en el 9%, elevaron la propuesta al 15%.
Los dirigentes gremiales Sergio Palazzo, Andrés Castillo, Eduardo Berrozpe y Alejandra Estoup explicaron que el aumento propuesto era en 4 cuotas: un 5% retroactivo al 1 de enero, un 4% desde el 1 de abril, un 3% a partir del 1 de julio y otro 3% a partir del 1 de octubre, pero ninguno de esos porcentajes es acumulativo y no contiene ningún sistema de actualización o «cláusula gatillo».
La Asociación Bancaria rechazó la propuesta y reclamó el pago de un «bono anual debidamente actualizado y que debió haberse abonado hasta el 5 de enero de 2018», según el acuerdo celebrado el 16 de febrero de 2017.
También reclamó el «cumplimiento integral» del fallo judicial del 19 de febrero y el abono de las sumas de la cláusula gatillo por los meses de enero y febrero, a la vez que reiteró el pedido de un aumento del 24,08% a partir del 1 de enero de este año, según la evolución del índice de Precios (INDEC) para 2017.
Ante la falta de avances, el ministerio de Trabajo convocó a una nueva audiencia para el 14 de marzo a las 15.