Mario Almirón, secreatario general del Sindicato Argentino de Docentes Privados (Sadop) se pronunció por «el diálogo en serio» como forma de entender la democracia y cuestionó que el gobierno nacional entienda esa herramienta como «un mero intercambio de posiciones».
«El gobierno dice lo que piensa y anuncia su ejecución de forma de decisión ya adoptada, lo que significa imposición unilateral y sin consenso. Para el gremio, en cambio, el objetivo principal del diálogo social es promover el consenso y la participación democrática en las cuestiones de gobierno», puntualizó.
Para el dirigente gremial, que integra la Corriente Federal de Trabajadores (CFT), el diálogo comprende «el intercambio de información con buena fe y colaboración; la consulta, que supone el compromiso de compartir opiniones, análisis y propuestas para tenerlas en cuenta, y la participación, porque si el Estado o los empleadores no la aceptan no hay negociación sino imposición».
El sindicalista rechazó «las políticas neoliberales» y aseguró que «el único fundamento para construir una sociedad seria, justa y civilizada es el trabajo, que es el gran articulador social».
El dirigente enfatizó que «la democracia no puede ser reducida al sufragio porque no sería real» y expresó que el sistema debe garantizar «el justo acceso de la sociedad a los bienes culturales, sociales y económicos» y entenderse como «forma de vida, orden y tarea», porque reclama «espíritu de construcción».
«Si se profundiza en la conciencia histórica y se asume que el mundo no es algo terminado sino a construir sobre valores, se hallarán algunas claves para superar los monólogos a fin de encaminarnos hacia la unidad que produce el diálogo», concluyó.