El secretario general del Sindicato de Conductores de Ferrocarriles La Fraternidad, Omar Maturano, destacó hoy el «alto atacamiento» a la huelga que llevan adelante los trabajadores del sector desde la medianoche y por 24 horas, y sostuvo que «el paro es un ejemplo de los trabajadores organizados».
En una conferencia de prensa brindada esta tarde, Maturano aseguró que la medida de fuerza «se mantendrá hasta las 24 horas».
«Veremos y analizaremos la propuesta que lleven el martes y evaluaremos, pero el paro se mantendrá hasta las 24», dijo Maturano en la rueda de prensa.
Se refirió de esta manera a la reunión paritaria que se realizó esta mañana en la secretaría de Trabajo, que pasó a un cuarto intermedio hasta el próximo martes a las 11.30, debido a la falta de acuerdo.
Más temprano, en declaraciones a Télam, había afirmado que «el paro es total y es un ejemplo de los trabajadores organizados».
El gremio La Fraternidad lleva adelante desde esta medianoche un paro de trenes de 24 horas que afecta a todo el servicio ferroviario, excepto los traslados de larga distancia a Rosario, Mar del Plata, Tucumán y Córdoba.
La medida de fuerza se realiza en reclamo de «una recomposición» salarial «de lo que se perdió por el aumento inflacionario».
En ese marco, durante toda la jornada, se registraban demoras y largas filas de pasajeros en las paradas de colectivos, especialmente visible en Retiro y Constitución.
En tanto, desde la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA) se informó esta mañana que se estaban reforzando los servicios de las líneas de colectivos aledañas a los servicios de ferrocarriles.
«Esto dentro del marco de limitaciones previas, sumado ahora a la demanda adicional, pero se están tomando todos los recaudos a nuestro alcance ante esta contingencia sobre los servicios ferroviarios suburbanos», indicaron desde la entidad a través de la red social X.
El sindicato que agrupa a los maquinistas adjudicó la responsabilidad de la medida de fuerza al Gobierno, que «no convocó a las partes a la conciliación obligatoria».
En un comunicado, Transporte criticó ayer la medida de fuerza convocada por la Fraternidad, en contraposición a otros gremios ferroviarios.
«Resulta inentendible la medida de fuerza por parte de La Fraternidad, que conlleva una mala fe negocial al encontrarse en plena vigencia la mesa de negociaciones paritarias, inclusive habiendo llegado, a principio del mes, a resultados positivos en los acuerdos», apuntó la Secretaría en el texto.
En tanto, a través del vocero presidencial, Manuel Adorni, el Gobierno nacional criticó hoy el paro de trenes, al considerar que «todavía estaba abierta» la discusión salarial en ese sector de transporte, y advirtió que «se están estudiando» qué medidas aplicar ante la protesta «para que existan consecuencias» por interrumpir un servicio en el que se movilizan un millón de personas.
«Se están evaluando las medidas pertinentes para que esto no quede sin consecuencias», expresó el vocero Adorni, en su habitual conferencia de prensa matutina en Casa Rosada.
Adorni mencionó que las posibles medidas alcanzarían «a todos los responsables» de la huelga, una forma de protesta que, consideró, «no es en contra del Gobierno nacional, sino de la gente».
El vocero del presidente Javier Milei se refirió a la huelga ferroviaria como primer tema de su conferencia. «Hoy es un día particular: más de un millón de personas han sido afectadas en su forma de trasladarse a sus trabajos, consultas médicas y ocio por el paro de trenes que estamos viviendo».
Adorni afirmó que la medida de fuerza es liderada «por un grupo de personas que cuando no está en el poder, le complica la vida a la gente».
El portavoz presidencial opinó que, por el contrario, «el sindicalismo debería bregar por los intereses reales de los argentinos», y sostuvo que La Fraternidad, el gremio que lidera Omar Maturano, «de fraterno no tiene nada» porque dejó «a un millón de personas a pie», reiteró.
Adorni, en ese sentido, mencionó que «la discusión paritaria» entre el Estado, a cargo del servicio de trenes, y La Fraternidad «estaba abierta, por lo tanto no correspondía» que se dictase una medida de conciliación obligatoria, con el objetivo de convocar a las partes a una negociación, «ni el paro».
«Por eso aclaré que se están estudiando las medidas para que haya consecuencias en esta situación en particular», resaltó Adorni.
Y advirtió: «El Gobierno lleva 73 días de gestión, no 70 años. Y esta práctica habitual de obstruir la vida de los argentinos en virtud de perpetuarse en el poder, no va más».
En tanto, fuentes oficiales dijeron a Télam que para el Gobierno el paro fue protagonizado por «uno solo» de los sindicatos que agrupan a los trabajadores ferroviarios y que el resto, justamente, no se sumó a la medida de protesta.