Estupor en la CTA por el juez que redijo la pena a violador
Es imposible leer los fundamentos del fallo que escribió Benjamín Sar Llargues, al que adhirió, Horacio Piombo y no entrar en estupor. Tal cual dice el diccionario para definir ese estado que te deja sin palabras, sin sentido y sin razón. Impacta con cuanto tecnicismo escriben los fundamentos de una decisión judicial, que en pocos párrafos, logra nada menos que dejar en libertad a un violador de un niño(a) de 6 años. Una pena de 3 años, sin antecedentes, permite la inmediata excarcelación. Ese es el efecto concreto de la reducción de la condena que se hizo efectiva en este caso.
La explicación no da lugar a dudas. Si ya había sido violado por el padre, todos los violadores sucesivos serán pasibles de conmiseración: “Me afecta al respecto una insondable duda que tiene por base esa famili...