Productores de Federación Agraria y gobiernos de la Región Centro reclamaron este jueves dar marcha atrás con la decisión de importar carne de cerdo desde los Estados Unidos, al advertir que con esa medida pequeños chacareros y agricultores están «destinados a desaparecer».
La entidad reunió en Rosario a productores porcinos de todo el país, cooperativas, especialistas del INTA, integrantes del cluster de Oncativo (Córdoba) y ministros de Producción de la Región Centro, para analizar el impacto del acuerdo.
El presidente de la Federación Agraria, Omar Príncipe, dijo que dar marcha atrás sería una «buena señal para respaldar el esfuerzo de miles de productores que hace años vienen trabajando para poner en pie la producción porcina nacional».
Ironizó que «la apertura de la importación de cerdos genera mucha mano de obra y valor agregado, pero no acá sino en Estados Unidos.
En la Argentina hay 40 mil puestos de trabajo y 180 frigoríficos vinculados a la producción porcina, tenemos el mejor estatus sanitario del mundo junto con Australia.
¿Lo vamos a poner en riesgo importando a nuestro país una enfermedad animal que acá no tenemos?».
Se trata de la enfermedad reproductiva respiratoria conocida mundialmente como el Mal de Pierce, de la que la Argentina está libre.
En tanto, Luis Contigiani, ministro de Producción de Santa Fe, adelantó que van «a solicitar estudios técnicos desde la Región Centro, para verificar el posible riesgo sanitario».
«De confirmarse, tendremos que avanzar con una barrera sanitaria. El cuadro de situación para la producción porcina es, una vez más, complejo. Se trata de un sector que viene creciendo hace unos 15 años, de la mano de pequeños y medianos productores, que con esfuerzo lograron que el consumo per cápita en el país llegue a cifras históricas», indicó.
El ministro santafesino además señaló que «ya tuvo que hacer frente el último tiempo a la importación desde Dinamarca, España y Brasil. Que hizo una gran inversión en lograr una genética de calidad, cortes magros que son recomendados por los médicos».
«Pasamos en el país de 3 kilos per cápita de consumo en 2002 a 18 kg en estos tiempos. Ha hecho un gran trabajo el sector porcino, en tener carne libre de enfermedad, por eso es un capital que hay que defenderlo», añadió.