Pese a estar en la cima de los beneficiarios del nuevo orden económico impuesto por el gobierno de Macri, los bancos privados continúan con su práctica de «optimización» de los recursos humanos que se traduce en ajuste sobre los laburantes pese a este tiempo de vacas gordas para sus balances.
Este es el caso del Santanderrio que se niega a cumplir con pautas de liquidación salarial oportunamente acordadas generando la reacción de su Comisión Gremial Interna que viene realizando en los últimos días asambleas en la sede central del banco y en varias de sus sucursales.
Así lo explicaron fuentes del Sindicato :«Lo acordado era incluir todos los items de liquidación salarial dentro de las sumas remunerativas y consolidar, como legalmente está obligado a hacerlo el empleador, todo el salario a fin de que éste exprese integralmente su condición de tal. Sin embargo, el Santanderrio viene liquidando varios items como «adicional voluntario a cuenta» enmascarando así lo que corresponde cobrar a los trabajadores ya sea por condiciones puntuales (por ejemplo adicionales por título) o por cargos de convenio. Incluso el banco se encuentra en mora con el cumplimiento del CCT en varios casos porque se niega a reconocer la categoría que le corresponde a los trabajadores»
El reclamo, entonces, radica que en esa forma de liquidación que aplica el banco resta los montos no remunerativos del pago de aguinaldos, premios e indemnizaciones, generando un importante perjuicio al bolsillo de los bancarios.
También forma parte del reclamo la necesidad de adecuar el personal de las sucursales ya que varias de ellas están trabajando con una dotación disminuida, situación que hace colapsar también el servicio al cliente tal como se pudo comprobar el pasado martes cuando, luego del feriado por el día bancario, las sucursales del Santanderrio registraron inusuales demoras en la atención al público y obligaron al personal a trabajar varias horas mas que de costumbre…»horas extras?,…esa te la debo».